PSdeG y BNG reclaman un acuerdo político previo, y el PP ofrece consenso
04 jul 2012 . Actualizado a las 12:21 h.Hay diferencias en cuanto a la forma y ciertos recelos sobre el fondo, pero los tres grupos comparten el objetivo de aligerar la estructura del Valedor do Pobo para reducir su coste. Las disensiones afloraron ayer en la apertura del trámite parlamentario para una reforma de la ley de la institución que el PP envuelve en su discurso de austeridad y que la oposición ve como una maniobra de la Xunta para degradar sus funciones. Pese a las escaramuzas, el debate que abrió el primer pleno extraordinario del mes encauzó la posibilidad de llegar a un acuerdo para suprimir tres de los cinco cargos del Valedor. La negociación arranca con el voto favorable del PP y la abstención de socialistas y nacionalistas.
El portavoz del grupo mayoritario de la Cámara, Pedro Puy, puso números al adelgazamiento de la institución que Feijoo comprometió en el debate de política autonómica celebrado en marzo. Aseguró que la extinción de los tres vicevaledores y del puesto de secretario xeral, y la creación en su lugar de un adjunto al titular del organismo, permitirá ahorrar 330.000 euros al año sobre un presupuesto que asciende a 2 millones. Puy señaló que la reforma también persigue «gañar eficiencia», a través de un desarrollo mayor del uso de las nuevas tecnologías.
Frente a Puy, PSdeG y BNG construyeron discursos similares. La tesis común fue que el adelgazamiento del organigrama del Valedor do Pobo no requiere de una reforma de la ley, porque la actual ya permite tener un único vicevaledor donde hay tres. La socialista Dolores Rodríguez Amoroso tachó la revisión del texto que dio lugar a la creación del defensor del pueblo gallego de «operación meramente cosmética» orientada a «conseguir outro titular de falsa austeridade polo Goberno de Feijoo». La parlamentaria del PSdeG advirtió que su grupo «non caerá na trampa dunha reforma exprés para o escaparate», y abogó por reducir los gastos del Valedor en asesores. La institución cuenta con seis personas con esas funciones.
El nacionalista Alfredo Suárez Canal reclamó al PP que vuelva sobre sus pasos y mude el itinerario elegido, para que la modificación de esta institución comisionada del Parlamento no responda a la propuesta de un grupo, sino al consenso de la Cámara. Suárez Canal reprochó al PP que recurra a la reforma para distraer la atención ante el incumplimiento del plazo de un mes para nombrar nuevo valedor. Pese a que transcurrido ya más de mes y medio desde que Benigno López dejó el cargo, a raíz de unas declaraciones en el Parlamento en las que defendió los recortes y la posibilidad de suspender la ley de dependencia, el vicevaledor primero, José Julio Fernández, sigue ocupando ese puesto en funciones.
El exconselleiro, que dijo que el BNG no se opone a rebajar cargos, indicó que «o argumento do aforro non se sostén», porque la ley permite tener un único vicevaledor. Resolvió que el PP busca «degradar unha institución fundamental para garantir os dereitos dos máis febles».
Puy recogió el guante del diálogo y subrayó la «actitude absolutamente aberta ao consenso» del PP. La abstención de PSdeG y BNG allana la vía del acuerdo en una institución que ahora tiene un vicevaledor operativo, tras la dimisión de Dolores Guinovart por las declaraciones del valedor saliente y el papel de José Julio Fernández como sustituto en funciones.