Más de 900 mujeres cuentan con protección policial en Galicia

José Manuel Pan
josé manuel pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Desde la denuncia se establece la vigilancia, que varía según los casos

29 jun 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La muerte de Iria García Bouza ha causado gran preocupación e incertidumbre por las circunstancias que rodearon al crimen. Pero las amenazas y los insultos a mujeres por sus parejas o exparejas no son nada nuevo para policías, jueces y fiscales, y para todas las personas que a diario trabajan con mujeres maltratadas. La cifra impone. En Galicia hay 3.843 mujeres que se han sentido amenazadas por sus parejas y que han decidido denunciar su caso, casi siempre después de muchos intentos de arreglo casi siempre imposible. Pero hay un grado más, el de las mujeres que, ante el riesgo que corren, necesitan una protección policial más específica. En ese caso hay 918 gallegas, que entran en la rueda de vigilancia, cuya intensidad varía en función de la gravedad del caso, del nivel de riesgo.

Desde la denuncia comienza un proceso en el que toda la Administración debe ponerse a la entera disposición de la víctima. Se hace una valoración inicial de las circunstancias de la víctima para concretar su nivel de riesgo, que va desde el bajo hasta el extremo. Antes hay un estado de no apreciado, que es el de la primera denuncia, en el que se informa a las víctimas de sus derechos y recursos a su disposición, explican fuentes de la lucha contra la violencia machista en Galicia. Esa valoración inicial puede variar porque se analizan periódicamente las circunstancias de cada caso. Y esas circunstancias varían a menudo «porque muchas veces la víctima renuncia a mantener la denuncia contra su agresor», afirman las mismas fuentes, que recomiendan siempre denunciar los malos tratos «porque esa es la única forma de que podamos darles protección».

Sin embargo, la única protección es, en muchas ocasiones, la cárcel. Hay 310 supuestos maltratadores presos en las cárceles gallegas.