La Diputación de A Coruña sustituirá 18 coches oficiales por cinco de bajo consumo

S. Lorenzo, S. Acosta LA VOZ/REDACCIÓN

GALICIA

Las cuatro instituciones provinciales mantienen parques móviles con decenas de vehículos para sus corporaciones

27 jun 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Las cuatro diputaciones provinciales cargan con gravosas facturas para mantener decenas de vehículos oficiales que prestan servicio a sus presidentes y a los miembros de sus grupos de gobierno. Como media, cada institución cuenta con al menos cuatro berlinas de alta gama para usos oficiales, que se complementan con otros automóviles, furgonetas y maquinaria. El elevado coste de estos parques móviles ha llevado a las diputaciones a adoptar medidas para reducirlos. Es el caso de la coruñesa. Su presidente, Diego Calvo (PP), anunció ayer que se desprenderán de los 18 coches oficiales de la institución.

«Queremos desfacernos de todos, porque teñen un custe moi elevado de mantemento», explicó Calvo. Esto no implica la renuncia al vehículo oficial. De esos 18, la Diputación coruñesa utilizará los tres que son de gama más alta para negociar la adquisición por renting de cinco automóviles. Además de ser más modestos, esos nuevos vehículos que la institución destinará a los desplazamientos oficiales de miembros del grupo de gobierno deberán tener prestaciones que abaraten los gastos. Calvo precisó que el primer requisito que la Diputación exigirá en la operación es que los coches que reciba a cambio de los tres de gama alta sean «híbridos e de baixo consumo».

Para actos oficiales

Los tres vehículos que entrarán en esa negociación son un Audi A8 blindado que, según la institución, está sin usar; y dos A6 del mismo fabricante alemán de los cuatro aros. Uno de estos dos coches es el que ha utilizado hasta ahora el presidente de la Diputación coruñesa, que emplea el otro para desplazamiento a actos oficiales de miembros del grupo de gobierno. En cuanto al uso que la institución provincial dará a los cinco automóviles más económicos que pretende conseguir a cambio, dos serán para esos desplazamientos a actos de carácter oficial y los tres restantes quedarán para servicios internos.

Los otros 13 coches que no entrarán en esa operación de renting serán cedidos por la Diputación a concellos o entidades sociales. De hecho, el Concello de Ames ya ha recibido uno de ellos. El equipo de gobierno tomó esta decisión porque la mayoría de esos vehículos rondan los 20 años, por lo que su valor en el mercado es «ridículo» y, subrayó Diego Calvo, «e mantelos custa máis do que valen».

El resto de las instituciones provinciales también han adoptado o comprometido medidas de ajuste similares, aunque menos ambiciosas. La de Lugo tiene 12 automóviles a disposición de los miembros de la corporación, si bien su parque móvil cuenta con 120 vehículos, entre los que se incluyen maquinaria y furgonetas para los operarios. Hasta la salida de Cacharro, la institución tenía 56 vehículos alquilados, por los que ya había abonado 1,4 millones. El actual equipo, que preside Gómez Besteiro (PSOE), ha reducido ese alquiler a 19 unidades, lo que recortó 1,1 millones de gasto. Además, adquirió furgonetas para los capataces de carreteras, informa Benigno Lázare.

Dos Audis en Ourense

En la Diputación Provincial de Ourense, José Manuel Baltar (PP) tiene a su disposición dos coches, un A4 y un A6. La oposición objeta que no existe un censo global del parque de vehículos y maquinaria, que está asignado por servicios, informa Xosé Manuel Rodríguez. La de Pontevedra dispone de un Citroën C6 cedido por la factoría de Vigo, que es el que usa el presidente Rafael Louzán (PP); y de 3 unidades del modelo C5, propiedad de la Diputación y que usan los miembros del grupo de gobierno, informa Christian Casares.