El sector calcula que hay 500 talleres clandestinos en Galicia

José Manuel Pan
josé manuel pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Los empresarios aseguran que los ilegales les causan un gran perjuicio

18 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El incremento de talleres clandestinos está causando un gran perjuicio al sector de reparación de vehículos. Y el daño no es solo para los profesionales y empresas, ya que los automovilistas que deciden acudir a ese tipo de establecimientos ilegales no tendrán ninguna garantía en la reparación ni tampoco podrán reclamar si algo sale mal. No hay factura. No se paga IVA. No se pagan impuestos. Es la competencia desleal. Luis Abelleira, presidente de la Federación Gallega de Talleres, considera que los ilegales causan un gran perjuicio al sector: «No pagan impuestos ni se rigen por ninguna de las normas que nosotros cumplimos. Y a nosotros nos suben los impuestos», dice Abelleira, quien calcula que en Galicia hay cerca de 500 talleres clandestinos. Solo en Pontevedra se cree que hay entre 100 y 150 establecimientos ilegales, como explicaron el lunes los representantes pontevedreses del sector. Abelleira cree que la cifra es similar en Lugo, Ourense y A Coruña.

El presidente de la Federación Gallega de Talleres, que agrupa a unos cuatro mil establecimientos de toda la comunidad, echa de menos un mayor control por parte de las Administraciones competentes. «Es necesario un mayor control de los ilegales, porque si no no se consigue nada». En eso está ahora la Delegación del Gobierno en Galicia, que coordina un plan de vigilancia para detectar este tipo de fraude y en el que están implicadas la Agencia Tributaria y la Inspección de Trabajo.

«No solo son nuestros empleados los que trabajan de manera ilegal», asegura Abelleira. El presidente de los talleres gallegos sostiene que muchos locales clandestinos están regentados por desempleados que durante meses han recibido cursos de formación organizados por la Administración. «Les hemos estado pagando entre todos esa formación para que ahora nos hagan la competencia desleal, para que nos hagan la puñeta», afirma Abelleira.

De noche y los fines de semana

Los talleres clandestinos ejercen su actividad mayoritariamente de noche y los fines de semana, según los cálculos que maneja la Federación Gallega de Talleres. De esa forma es mucho más difícil el control de la actividad ilegal, que en muchos casos se realiza en domicilios particulares, como reveló el lunes el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez. Los empresarios del sector dicen que en la mayoría de los casos los automovilistas llevan sus vehículos a esos talleres cuando salen de sus respectivos trabajos. A las nueve o a las diez de la noche empieza la clandestinidad.