«Hay que conocer el origen del fuego para aventurar hipótesis»

José Manuel Pan
josé manuel pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

15 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Galicia ardió en marzo como en agosto. Se dieron las condiciones de sequía y altas temperaturas para que el fuego arrasase los montes. Y como en agosto, volvió la polémica, los mitos sobre el fuego, la controversia política y el debate sobre la intencionalidad. Al margen de eso, los expertos continúan con su trabajo. Álvaro García Ortiz (Lumbrales. Salamanca, 1967) es uno de ellos. Es el fiscal de Medio Ambiente de Galicia y coordina desde el 2004 las investigaciones policiales relacionadas con los incendios. Él sabe bien lo difícil que es indagar sobre un fuego, sobre su origen, sobre su autoría: «No podemos dejarnos llevar por sensaciones, ni por la primera explicación que nos dan. Hay que ir al origen».

-Incendios en marzo. ¿Es normal?

-Hablar de normalidad en fuegos es complicado. No es sorprendente que alrededor de la semana 13 del año, con el final del invierno y el inicio de la primavera, haya un repunte de incendios forestales. De hecho, la 13 es la semana que todos los expertos señalan, y se ve en las estadísticas con un pico a veces tan importante como los de julio y agosto.

-¿Hay que asumir entonces que con buen tiempo siempre habrá incendios?

-El meteorológico es el factor más decisivo en los incendios. Todos los factores de riesgo se multiplican con unas determinadas circunstancias meteorológicas. Si a eso añadimos que estacionalmente es un buen momento para hacer quemas, pues se juntan los dos factores.

-¿Galicia tiene que acostumbrarse a esa lacra?

-Es que estadísticamente es así. Los factores que los expertos señalan, como temperatura, humedad y viento, son ciertos. Es la meteorología la que marca el ritmo de los incendios.

-¿Existe la intencionalidad de la que habla la Xunta?

-Hay que ver qué incendios son intencionados, y dentro de esos, qué perfil tenemos. Hablas con expertos de otros países y las cifras varían mucho, desde el 25 hasta el 40 % de intencionalidad dolosa, no por mal uso. Aun así, sería aterrador pensar que de ocho mil incendios que se producen en Galicia, la mitad sean intencionados. Y comparando la superficie quemada por los atribuidos a incendios dolosos con la de los atribuidos a imprudencias, vemos que son equiparables estadísticamente.

-Por tanto, ¿qué parte de estos siniestros se pueden atribuir a incendios dolosos?

-Es muy difícil decirlo. Podemos aventurarnos, pero cuando hay crisis incendiarias importantes, el imaginario se dispara. Pero no podemos dejarnos llevar por sensaciones. Hay que ser científico, buscar el origen, ir al método de las evidencias físicas. Y cuando los investigadores tengan el resultado decirlo, porque el imaginario popular, y más en los incendios, se dispara. La madera, la economía del fuego, el urbanismo, esos son los grandes imaginarios. Detrás de esto hay algo, se dice. Esa frase es muy dura, porque ¿qué es ese algo? Si no me dicen de qué hablamos, yo no puedo discutirlo. Son fenómenos investigables, debemos ser rigurosos en el diagnóstico. Tenemos esa responsabilidad.

-¿El reciente incendio en las fragas del Eume fue intencionado?

-No lo sabemos. Hasta que no nos lo digan los investigadores no podemos decir ni una cosa ni otra. Hay que tener mucha paciencia. Lo ocurrido en las fragas del Eume sí nos ha dado una lección, que hay que tener la certeza de cuál es el origen del fuego para poder aventurar hipótesis.

-¿Y había tres focos o uno?

-No puedo avanzar nada de la investigación.

-¿Pero puede un incendio forestal producirse sin acción del hombre?

-Puede ser por generación espontánea, por un rayo, por una chispa. Puede haber muchas razones.

-¿Hay que modificar la legislación de incendios?

-Si entendemos que la pena al incendiario en España cubre desde los seis meses a los veinte años de cárcel, hay un marco normativo suficiente. Y sí se puede endurecer, pero aumentando el suelo de las penas. Quizá sea así menos visible, pero también es más real.

álvaro garcía ortiz fiscal de medio ambiente de galicia

«Sería aterrador pensar que de ocho mil incendios, la mitad sean intencionados»

«Detrás de esto hay algo, se dice. Esa frase es muy dura, porque ¿qué es ese algo?»