El director xeral de Rehabilitación Urbana del Concello de Ourense, Xosé Carballido Presas, anunció ayer su dimisión del cargo tras decidir abandonar el Bloque e integrar las filas de Máis Galiza, según informa Miguel Ascón. Carballido, que fue director xeral de Infraestruturas Agrarias en la Xunta durante el Gobierno bipartito, ha venido siendo uno de los mayores defensores en la provincia de Ourense de que la corriente debía abandonar el frente para constituirse en partido. «Eu non fun elixido nunhas eleccións. O meu posto era de confianza», explica para justificar su dimisión como director xeral.
Los alcaldes se quedan
Como se puso de manifiesto en la asamblea de Máis Galiza del fin de semana, la mayoría de los alcaldes que pertenecían a dicha disciplina han optado por mantenerse en el Bloque. Sin embargo, dicha decisión será sometida a examen por alguno de los regidores, como ayer manifestó el de Ribadeo, Fernando Suárez. «Quedo onde estou, aínda que a dirección deba saber que non fico incondicionalmente», ya que aseguró esperar a que la dirección del BNG dé los pasos adecuados para demostrar que «hai sitio para todos», informa José Francisco Alonso.
Orlando González, alcalde de Mondoñedo, manifestó también que seguirá en el BNG «porque fun elixido por esas siglas», aunque advirtió que si en algún momento decide abandonar la agrupación, lo haría renunciando a su acta de concejal.
Otros cargos institucionales vinculados a +G prefieren por ahora no desvelar sus decisiones respecto al BNG.
Unión con los «irmandiños»
Mientras alcaldes y concejales nacionalistas se replantean su futuro en el BNG, la pequeña formación Nova Esquerda Nacionalista anunció ayer su disposición a sumarse a la plataforma política que trata de nuclear el Encontro Irmandiño. El grupo liderado por el exsindicalista Lois Pérez Leira considera que Xosé Manuel Beiras «é o referente máis importante da esquerda nacional galega».