Pese a la sequía, el director xeral de Augas de Galicia dice que los embalses de abastecimiento aún resisten
28 feb 2012 . Actualizado a las 11:35 h.Galicia se reseca tras la primavera más dura de los últimos 50 años, el verano con menos precipitaciones desde 1981 y, después de un respiro puntual en otoño, uno de los inviernos con menos agua en decenios. El director xeral de Augas de Galicia asegura que el nivel de los embalses de abastecimiento, los de la cuenca Galicia-Costa, «es normal para esta época del año». Están al 72 %, «un punto por encima de la ocupación del año pasado». Donde sí se nota la sequía, añade Francisco Menéndez, es en el campo y en en las presas de uso hidroeléctrico o industrial, 20 puntos por debajo del nivel de febrero del 2011. «Son embalses mucho más grandes, necesitan más agua para llenarse y la lluvia que cayó en el mes de noviembre y principios de diciembre no fue suficiente. Sin embargo, los de abastecimiento, que son más pequeños y se recuperan mucho más rápido, sí que notaron la subida y se situaron en niveles normales», afirma Menéndez.
-Pero el de A Coruña está al 60 %, y el de Caldas, al 38 %. ¿No son niveles bajos?
-En el caso del de Cecebre [A Coruña], el de Eiras [Vigo], Forcadas [Ferrol] y O Con [Vilagarcía] no se les deja subir mucho más del nivel que tienen actualmente para guardar la protección contra avenidas, por si hay precipitaciones abundantes. El de Caldas sí que está por debajo de lo normal y es quizás el que más ha notado la situación de sequía. De todas maneras, ahora mismo su nivel está estabilizado.
-¿Con las reservas existentes, entonces, hasta cuándo está garantizado el suministro?
-En los grandes embalses casi ni cabe hablar de garantía porque está entrando la misma cantidad de agua que sale, pero más que el caudal ecológico que tienen marcado, por eso mantienen su nivel. Todavía habría margen, están en una situación algo holgada aún. El problema son los pequeños sistemas, que dependen directamente de ríos o de captaciones propias. Ahí sí que la sequía se está notando más porque son más sensibles a dos meses sin llover. Esos pequeños autoabastecimientos, al igual que pasó el verano pasado, son los que más sufren. Digamos que la mirada sobre la problemática de la sequía ahora debe estar más en esos pequeños abastecimientos que en los grandes sistemas, que tienen capacidad de regulación y, por tanto, tienen reserva.
-¿Existe algún plan en caso de que la sequía persista? La predicción meteorológica avanza lluvia para finales de semana, pero no en gran cantidad, y no se puede asegurar cuánto lloverá en adelante.
-Como la situación de sequía respecto a los grandes embalses se establece en función de la reserva, no cabe hablar de sequía en ellos porque la reserva, de hecho, es la máxima ahora mismo. Lo que hay que pensar es que, por poco que llueva en primavera, llegaremos al verano con los embalses llenos, que es lo normal. Si no fuera así, habría que pensar de qué situación se parte porque en Galicia el verano siempre funciona igual: se llega con los embalses llenos y, a veces un poco antes, a veces un poco después, empieza la curva de bajada hasta que en el otoño se empiezan a recuperar. Por ejemplo, el año pasado la curva de bajada empezó muy pronto. Este año, en principio, la situación a medio plazo parece ser que no va a ser muy húmeda, pero ello no significa que los grandes sistemas de abastecimiento vayan a sufrir. De momento no se puede hablar de problemas en ellos. Donde sí se puede hablar de problemas es en el campo y en los autoabastecimientos, que son mucho más dispersos, difusos y difíciles de cuantificar.
-Pero imagínese que se repite la sequía de la pasada primavera.
-Si no llueve, de aquí al verano tendremos problemas. Estamos ya muy atentos, aunque pronto se podrá subir el nivel a máxima ocupación para prepararnos para el verano, y ver cómo empezamos la temporada de verano.
-¿Cómo actuarían en caso de que la situación no mejorara?
-Tanto Medio Rural como nosotros ya desarrollamos el año pasado un sistema de seguimiento que acabó activando la comisión de la sequía, según el plan de emergencias de Protección Civil contra la sequía, y en algunos casos los pequeños ayuntamientos o incluso las explotaciones ganaderas tuvieron que abastecerse puntualmente mediante cisternas. La situación el año pasado fue muy particular, esta lo está siendo también, pero ahora no hay problemas de abastecimiento. Se dio un caso puntual, en Portomarín, porque se les había secado completamente el abastecimiento de una parroquia entera y hubo que acudir allí y activar una obra de emergencia. Pero ahora mismo no estamos en una situación crítica ni mala y hay que esperar a que las lluvias recuperen. Por supuesto, hay que mantener los buenos hábitos en el consumo, que el año pasado permitieron que la noticia fuera que en una sequía tan grave y prolongada no hubiera restricciones en los grandes embalses. La moderación en el consumo nos permite ser mucho más eficaces en la gestión de los recursos.
francisco menéndez iglesias director xeral de augas de galicia
«El tiempo a medio plazo no va a ser húmedo, pero eso no significa que los embalses sufran»
«La sequía se nota en los sistemas que dependen de ríos o captaciones propias»