«Só quere protagonismo», dice el lucense denunciado por Tamara

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

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La cantante sevillana, que lo acusa de secuestro, no hace declaraciones y espera a la sentencia

22 feb 2012 . Actualizado a las 17:21 h.

Pensó que se trataba de una carnavalada. El empresario chairego y promotor de las fiestas de Duarría (en el municipio lucense de Castro de Rei), José Ángel López Sande, Ventosinos, no supo de la denuncia por detención ilegal y coacciones que presentó contra él la cantante sevillana Tamara hasta las últimas horas de la mañana de ayer. Está hospitalizado como consecuencia de una intervención quirúrgica. Cuando le fue comunicado, pensó que podría tratarse de una broma del martes de carnaval.

López Sande prefirió no hacer declaraciones sobre la situación. No obstante, no da crédito a que tenga que enfrentarse a una denuncia nada menos que por secuestro de la artista y de su representante en una sala de difuntos del cementerio. También rechaza de plano la acusación de coacciones. Aseguró que en Duarría, en la noche del 29 de julio del año pasado, no sucedió nada que se parezca a lo que dice la demanda.

Ventosinos solo encuentra una explicación a esta situación en el hecho de que la artista busque publicidad. «Só quere protagonismo», indicó el promotor de los festejos. El empresario chairego dijo que, por ahora, ninguna persona lo llamó para declarar.

Recordó que esa noche la artista y sus acompañantes mostraron «aires de superioridad» además de llegar tarde al recinto para hacer las pruebas de sonido. Fue esa actitud de prepotencia, según el promotor del espectáculo en el que también actuaba Sergio Dalma, la que acabó desembocando en la suspensión de la actuación. Ventosinos recordó en su momento que ninguno de los artistas que pasó por Duarría y que utilizó los camerinos del cementerio mostró queja alguna o se fue descontento con el trato recibido. Todo lo contrario. Los integrantes de Camela, por ejemplo, estuvieron tan a gusto que incluso alargaron el concierto, destacó.

El denunciado espera ahora a lo que pueda decidir la Justicia, pero entiende que lo ocurrido no tiene absolutamente ninguna trascendencia de tipo penal.

Ayer, el contacto con Tamara o su representante fue totalmente imposible. La persona que atendió la llamada expresó que «hasta que haya sentencia, no se va a hacer ninguna valoración ni declaración».

El caso Tamara queda, pues, en manos de la jueza Pilar de Lara Cifuentes, titular del Juzgado de Instrucción número 1, en el que se tramitan numerosos asuntos de gran calado, como es el caso de denuncias urbanísticas en la capital lucense o también la operación Carioca, relacionada con la prostitución en locales de alterne.

La magistrada ha de decidir, entre otras cuestiones, si lo que denuncia Tamara es una cuestión de tipo penal o si, por el contrario, se queda en un asunto administrativo relativo al pago o no de la actuación que no llegó a producirse.