La histórica líder del SLG Lidia Senra se suma a las bajas del BNG

m. Cedrón / m. beramendi REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

OSCAR CELA

Pérez Bouza se marcha y abre la puerta a participar en otro proyecto

11 feb 2012 . Actualizado a las 10:31 h.

Las bajas dentro del seno del BNG continúan. Una de las últimas es la de la histórica líder del Sindicato Labrego Galego (SLG), Lidia Senra, que durante estos días ha causado baja en la organización frentista. Aunque ha confirmado la marcha, la exlíder agraria no ha querido hacer ningún tipo de comentario al respecto.

Miembro del consello nacional por el Encontro Irmandiño hasta la última asamblea, la que fue durante 18 años la cara del movimiento agrario gallego ligado al nacionalismo no ha esperado a la asamblea que mañana celebrará esa corriente en Santiago de Compostela para debatir su permanencia o no dentro del BNG. El paso que den los irmandiños, liderados por Xosé Manuel Beiras, será fundamental para el futuro de un Bloque que llegó a tener 18 escaños en el Parlamento gallego y que ahora tiene 12.

Aunque repetidas veces cuando estaba al frente del SLG, cargo en el que dio el testigo a Carme Freire en noviembre del 2007, había dicho que una cosa era el BNG y otra su lucha por la defensa de los intereses del campo, algunas fuentes han confirmado las diferencias de parecer que mantiene con algunos miembros de otras corrientes del BNG, unos desencuentros que ya comenzaron durante la etapa del Gobierno bipartito.

Pero no es el único nombre conocido ligado al BNG que se ha ido desde la celebración de la asamblea. Un día después de que Teresa Táboas tramitara su baja como diputada autonómica del BNG por discrepancias con la línea política salida del cónclave, el exsenador ourensano Xosé Manuel Pérez Bouza oficializaba su adiós como afiliado del BNG tras 20 años de militancia por idéntico motivo.

En una carta remitida a la secretaria de organización del frente, Montse Prado, el que fuera candidato por Ourense en las pasadas generales argumentaba su baja en motivos políticos y la desvinculaba de decisiones individuales o colectivas que pudiesen adoptar otros.

Pérez Bouza cumplía así con lo advertido en los prolegómenos de la decimotercera asamblea, cuando dejó caer que se marcharía. Entonces, el exsenador sostuvo que la única salida que le quedaba al BNG era ir hacia una asamblea de consenso entre todas las corrientes, en la que se alumbrara un nuevo proyecto organizativo y político y con nuevos líderes.

«Lonxe de reformular o proxecto, o que se fixo foi reafirmar unha liña equivocada cunha evidente división interna; eu teño que respectar a vontade da militancia o que non quere dicir que a comparta, por iso creo que o mellor que podo facer é marchar do BNG», explicó ayer el exsenador a este diario.

Pérez Bouza ha reiterado que el BNG es un instrumento acertado o equivocado de servicio al país y que, él mismo, como nacionalista no va renunciar a su verdadero compromiso, que es Galicia, con lo que deja la puerta abierta a participar en un proyecto político que ocupe el espacio que, a su entender, no cubre el BNG. En declaraciones efectuadas a este diario el pasado martes, Pérez Bouza lamentaba que el Bloque salido de la última asemblea es una formación destinada a «convocar manifestacións», que renuncia a ser una verdadera alternativa de Gobierno.

Lluvia de bajas

Y las bajas también parecen haberse multiplicado entre los militante de base durante la última semana. En la comarca de Santiago, por ejemplo, algunas fuentes hablan de que podrían tenerse realizado ya en torno a una treintena. Otras fuentes consultadas hablan también de que en estos días podría formalizarse otra más para la lista, la de la compostelana Encarna Otero, que fue secretaría xeral de Vivenda con Teresa Táboas.

Exlíder del Sindicato Labrego Galego

Fue la cara del nacionalismo agrario durante 18 años hasta que le dio el testigo a Carme Freire. Estuvo en varios foros europeos defendiendo al sector y encabezó protestas en contra del pago de la multa por exceso de cuota láctea.

Cabeza de lista del BNG por Ourense en las generales El exsenador nacionalista fue concejal en el Ayuntamiento de A Porqueira y llevaba más de veinte años militando en el Bloque. Durante el proceso preasambleario fue una

de las voces más críticas

con el proceso.