El tiempo no respeta al «Manneken Pis» de Chantada

La Voz

GALICIA

13 feb 2012 . Actualizado a las 17:46 h.

Este muñeco de aspecto inquietante, procedente de la emigración gallega en Suiza y que hace cinco años aún era rubio, continúa emparedado en el muro exterior de una finca de Chantada con el propósito inicial de actuar de desagüe. Su éxito virtual no lo ha salvaguardado de la erosión del sol y, así, y a pesar de que mantiene el tipo, ha perdido parte de sus extremidades. Conserva, de todas formas, su apéndice más importante, por el que saltó a la fama. En la zona, los vecinos se debaten entre la indiferencia y un respetuoso silencio. Con sordina se oye un «faime gracia» y un «a min non me molesta».