El Fiscal Superior de Galicia, Carlos Varela, dice que los asaltantes de Vigo y Ferrol podrían tener formación militar.
22 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El fiscal superior de Galicia hizo un repaso al momento delictivo actual el pasado viernes en A Coruña. Participaba en una jornada de trabajo de la Unión de Asociaciones de Seguridad Privada de España. Allí aportó su visión del papel de la Fiscalía y la situación judicial actual.
-Aboga por una reducción de 45 partidos judiciales que hay en Galicia. ¿Por qué?
-La planta judicial actual obedece a un modelo del siglo XIX, donde el referente es el partido judicial como centro de servicios públicos. Hoy todo eso cambió. Hay muchas mejoras en comunicación y deberíamos plantearnos una nueva matriz judicial de referencia. Tiene que ser mucho más grande para adaptarse a las dinámicas socioeconómicas del siglo XXI.
-¿Podría poner un ejemplo?
-Todo lo que esté a media hora de distancia, medido en tiempo, debería estar atendido por una misma cabecera de servicios. Eso supondría una reducción, pasando de esos 45 a un número mucho menor. Este tipo de organización la hizo el área sanitaria. Por ejemplo, zonas como A Estrada o Lalín, una vez que se comunicaron bien con Santiago se incluyeron en esa área, cuando su capital de provincia es Pontevedra.
-¿Es factible precisar cuántos partidos quedarían?
-No tengo hecho el estudio, pero se reducirían significativamente. Si se realizase se podría ver, por ejemplo, hechos como que la Galicia del litoral está mejor comunicada que la interior. Tendríamos dos países dentro de un mismo país, judicialmente hablando, con lo que en la costa debería hacerse de un modo y, en el interior, de otro.
-Vuelven los asaltos con encapuchados en zonas rurales. ¿Es un momento peligroso?
-No lo diría así, sino que nos encontramos ante modalidades nuevas de cometer delitos. En un tiempo de crisis los problemas criminales asumen proporciones y perfiles diversificados, en relación a otros tiempos de mayor estabilidad. Esto nos exige a los órganos de la Policía Judicial y a las propias autoridades judiciales respuestas diferenciadas en el modo de trabajar en el proceso de la investigación. Esas realidades tienen que ser tenidas en cuenta porque, si se repite, tenemos que buscar nuevos métodos de trabajo para hacer frente a ellas.
-Hay un uso indiscriminado de la violencia. Se achaca a que son bandas venidas de países con un realidad social mucho más violenta. ¿Lo ve usted así?
-Se habla de ello, pero quizá tendríamos que tener todo esto mucho mejor estudiado. Por las informaciones que se conocen, se desprende que, efectivamente, existen bandas de esta naturaleza que vienen de países del Este y, en ocasiones, con un pasado ligado al ejército. Es decir, es gente que tiene preparación militar y, por tanto, unos conocimientos mucho mayores que un delincuente común.
-¿Qué le dice a la gente que está alarmada por ello?
-Que las fuerzas de seguridad estarán siempre atentas para, primero, prevenir este tipo de delitos. Y, luego, en el caso de que se cometan serán llevados a la Justicia.
-Establece una relación entre crisis y aumento de la delincuencia. ¿Ha aumentado esta en Galicia en el último lustro?
-No, la palabra clave en este terreno es estabilidad. Hemos registrado algún aumento en procedimientos así como en escritos de calificación de la Fiscalía. Pero son siempre moderados y poco significativos.
-¿Está en la media nacional?
-Yo creo que Galicia, incluso, está por debajo de la media nacional de delincuencia. Somos una comunidad pacífica, tranquila y segura. Quizá haya que mejorar en el tema de la delincuencia sin autor conocido.
-Un tercio de esos delitos sin autor conocido se quedan en un limbo jurídico, generando un esfuerzo inútil. ¿Cómo lo corregiría?
-Son diligencias que no tienen autor conocido, hechos que sobrecargan el sistema judicial. La solución es que eso no pase a sede judicial hasta que la policía haya registrado un autor conocido de la infracción y, por lo tanto, el órgano judicial pueda interrogar a una persona.