La fusión de consellerías se abre paso en la Xunta

Domingos Sampedro
d. sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Feijoo saludando a Farjas en el concierto de Navidad de la Sinfónica en A Coruña.
Feijoo saludando a Farjas en el concierto de Navidad de la Sinfónica en A Coruña. eduardo pérez< / span>

Feijoo sopesa la posibilidad de reducir más departamentos autonómicos para cubrir parte de los fichajes de Rajoy

04 ene 2012 . Actualizado a las 04:36 h.

En abril del 2009, Alberto Núñez Feijoo tomó la delantera en España reduciendo la talla de la Administración autonómica, al reducir de 13 a 10 el número de consellerías. Y la inminente salida del Gobierno de Pilar Farjas y de Marta Fernández Currás podrían abocar al presidente a fusionar algunas consellerías más para afrontar la recta final de su mandato y cuadrar el organigrama de la Xunta con el creado por Mariano Rajoy en el ámbito del Estado.

Por lo de pronto, los fichajes de Farjas y Currás obligan a Feijoo a cambiar como mínimo el 20 % de su Gobierno, a la vez que crean la ocasión propicia para hacer una remodelación más amplia con el fin de darle un nuevo impulso a algunas áreas del Ejecutivo que, al menos a los ojos del PP, no estaban funcionando como sería de esperar. Es el caso, por ejemplo, de las Consellerías de Industria, salpicada por los escándalos del Igape; y de Cultura, lastrada por la indefinición que todavía rodea al Gaiás.

Tampoco hay que descartar que los ministros de Rajoy continúen haciendo algunos fichajes más en la cantera de la Xunta. De hecho, nombres como el del secretario xeral para o Deporte, Lete Lasa, suenan para ponerse al frente del Consejo Superior de Deportes, y el de Samuel Juárez suele figurar en todas las quinielas.

Pero por lo de pronto, lo que toca es suplir las bajas. Para Sanidade, Feijoo podría optar por promover como conselleira a la secretaria xeral, Sagrario Pérez Castellanos, o a Rocío Mosquera, gerente del Sergas, o incluso refundir la consellería con la de Traballo e Benestar, lo que llevaría a Beatriz Mato a asumir las riendas de todo el departamento.

En Facenda, todo indica que la Xunta apostará por una solución interna, pero si hay cambios en Cultura, el jefe del Ejecutivo todavía tiene reservada la carta de fusionar esta área con Educación, tras endosar Turismo a Industria, lo que le permitiría acomodar la estructura de su Gabinete con la del Gobierno central.