Los peajes llegan a «la raia»

Monica Torres
m. torres TUI / LA VOZ

GALICIA

El Ejecutivo luso prevé ampliar el cobro en las autovías hasta Cerveira

10 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Portugal abrirá el año cerrando más la frontera con Galicia. El cobro en sus antiguas autovías scut (acrónimo luso de «sin costes para el usuario») tensó las relaciones en la eurorregión, pero ahora mantiene en pie de guerra a municipios lusos de la frontera que podrían acercarse más a Galicia que a Lisboa. La implantación del sistema de cobro en los 914 kilómetros de este tipo de viales acabó el jueves, según Estradas de Portugal. Pero la sombra, no obstante, se extiende ahora al norte.

El presidente de la Cámara de Vila Nova de Cerveira, José Manuel Vaz Carpinteira, confirmó ayer la intención del Ejecutivo luso de extender los peajes hasta esta localidad portuguesa. Es decir, que si la presión popular no lo remedia, el peaje se adelantará otros treinta kilómetros en dirección a Galicia y, en vez de comenzar en Viana do Castelo, donde los empresarios confirman ya pérdidas del 50 % en un año, se efectuará a la salida de Cerveira, estrechamente ligada a Galicia por el conocido como Puente de la Amistad.

La decisión parece tan irrevocable como el placaje en la ribera lusa. «Aún no nos confirmaron si será en enero o más tarde, pero, infelizmente, el Gobierno mantiene su intención que traer los peajes hasta aquí», destacó el regidor cerveirense. Vaz Carpinteira explicó que Lisboa «ya comenzó a colocar las cabinas de peaje, aunque se está retrasando gracias a la presión». Estos días entran ya también en funcionamiento los puntos de pago electrónico que se han habilitado en Vilar Formoso, Vila Real de Santo António y Vila Nova de Cerveira para facilitar el pago a gallegos y demás vehículos extranjeros. Para el alcalde de esta última localidad, no hay duda: «La ampliación de peajes puede ser catastrófica». Aquí ya no se habla siquiera de las controvertidas fórmulas de pago sobre las que se dirime también en Bruselas sino de que los municipios de las dos riberas de la desembocadura del Miño están fusionados, por lo que ese peaje se plantea como restablecer la frontera pero en territorio luso adentro.

«El pleno del municipio ya se ha manifestado en contra porque sería pésimo para nosotros, pero los planes siguen adelante», avanza Carpinteira. El alcalde sostiene, amparándose además en los estudios de Lisboa que ratifican pérdidas en la circulación viaria de hasta un 37 % en la A-28, que «no solo el beneficio para el Goberno va a ser poco sino que para nosotros la factura va a ser demasiada». El regidor recuerda que, paradójicamente, el 40 % de las empresas asentadas en su municipio están en manos de capital gallego y que, a trece kilómetros, se constituye estos días la eurociudad Tui-Valença do Minho. Desconoce aún las tarifas que se aplicarán, aunque reitera que el precio siempre será caro. En las demás scuts, señala, se aplican 90 céntimos por kilómetro, «pero no pueden estar hablando además de 2,70 kilómetros por ir de Cerveira a Viana». «Los peajes son injustificables porque no hay vías alternativas y menos ahora» concluye.

0,75 euros

1,15 euros

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