En cuanto al caso de Santa Comba, que no conocen uno igual ni parecido, los empresarios de discoteca esperan que el alcalde sea condenado «para que sirva como ejemplo y que el resto de los alcaldes vean que si miran para otro lado, no controlan o permiten la picaresca de muchos hosteleros pueden terminar de la misma manera, en el banquillo». Porque según recuerda Samuel Pousada, «el no hacer nada para evitarlo también conlleva una responsabilidad penal».
Aunque la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza no ha facilitado el registro completo de los establecimientos que operan en Galicia con licencia de tablao, fuentes del sector aseguran que son 200. La existencia de estos locales se debe a un ardid legal.