El Igape no pagará la ayuda a la farmacéutica intervenida en Lugo

Miguel Cabana
MIGUEL CABANA LUGO / LA VOZ

GALICIA

Nupel no recibirá el millón de euros, aunque fue publicado en el DOG

29 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El Instituto Galego de Promoción Económica (Igape) no pagará la subvención de casi un millón de euros a la farmacéutica lucense Nupel, intervenida por un juzgado de Lugo e investigada por la Agencia Tributaria. El conselleiro de Economía explicó ayer que el Igape tiene que publicar obligatoriamente la lista de todas las ayudas concedidas a lo largo del primer trimestre del año, tal como hizo el pasado lunes en el Diario Oficial de Galicia (DOG). Sin embargo, eso no significa que Nupel vaya a recibir el millón de euros porque, según explicó el conselleiro Javier Guerra, la farmacéutica no justificó convenientemente al Igape la inversión en la nave de medicamentos de unidosis que pretendía crear en Rábade. La ayuda de 992.942 euros respondía a una supuesta inversión subvencionable de 5,8 millones de euros en dicho proyecto, pero al parecer no fue suficientemente justificada por el empresario Jorge Dorribo, ahora encarcelado, y que presentó concurso voluntario de acreedores a los pocos días de ser intervenida la empresa por el juzgado.

El «DOG» no implica cobrar

La Consellería de Economía informó ayer de que el Igape está obligado a publicar la lista íntegra de las subvenciones en el Diario Oficial de Galicia, incluido el millón concedido a Nupel, aún a sabiendas de que no lo va a cobrar por estar mal justificado. Sostienen que, de lo contrario, incumplirían la ley, y que la publicación es un mero trámite del proceso que no implica automáticamente el cobro.

La nave en la que se iba a colocar la planta envasadora de medicamentos unidosis había estado dedicada hasta hace aproximadamente un año a taller de mantenimiento de los coches de ralis del equipo Nupel Racing Team, propiedad también del mismo empresario, Jorge Dorribo. La nave contaba con cinco elevadores y otros tantos paneles de herramientas, equipados con la mejor tecnología, que permitían a los mecánicos preparar al mismo tiempo cinco vehículos de competición.

Todo ese material fue desmontado y retirado de la nave para dejarla libre e instalar la envasadora de unidosis, que nunca llegó a funcionar. A día de hoy sigue prácticamente vacía, sin rótulos y con diverso material aislante, estanterías y paneles que denotan una obra todavía reciente. En semanas pasadas aún salieron de la nave de Nupel diversos efectos de su anterior cometido, pero ahora ya está completamente cerrada e inoperativa.

Mientras tanto, el Juzgado de Instrucción número 3 de Lugo prosigue con la investigación, en la que se mantiene el secreto de sumario y sigue habiendo 16 imputados, todos ellos en libertad menos el empresario Jorge Dorribo. Los tres administradores judiciales nombrados para dirigir la empresa en concurso voluntario de acreedores también trabajan por su parte tratando de contabilizar los activos y pasivos de Nupel para intentar llegar a una junta general de acreedores e intentar un acuerdo para salvar la empresa. La mayor prioridad es que cobre la plantilla, de casi 40 trabajadores, a los que se les adeuda la mensualidad de mayo. El pasivo inicial declarado por la empresa para pedir el concurso asciende a 30 millones de euros, y la subvención del Igape por tanto no va a poder utilizarse como ingreso, tal como estaba previsto.

Por otra parte, hay dos administradores nombrados por la Agencia Tributaria que trabajan en colaboración con la jueza que dirige el caso.

«A axuda aprobouse moito antes desta situación, pero non se pagará por incumprir os requisitos»

Javier Guerra