Son las únicas que podrían operar sin recibir transferencias externas
07 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Santiago de Compostela y A Coruña, por este orden, son las dos únicas poblaciones gallegas con más de 30.000 habitantes que con los recursos que generan podrían llegar a autofinanciar sus gastos de personal y los servicios básicos que prestan a sus habitantes, aunque no recibieran transferencias corrientes y de capital de otras Administraciones. Esta es la lectura que se desprende de los datos presupuestarios del año 2010, recopilados por el Ministerio de Economía, que coloca a la ciudad de Ourense y a localidades como Carballo y Narón entre las más necesitadas del auxilio externo para mantener el tamaño de su propia Administración.
El índice de cobertura de los gastos de funcionamiento de un concello es el resultado de dividir sus recursos propios (exceptuando las transferencias externas y lo captado mediante créditos) entre lo que gasta en su personal, en su administración y en los servicios básicos que presta. Este indicador muestra un retrato sobre las ciudades más sostenibles y autofinanciables, aunque no es un retrato fiable para valorar su solvencia, pues no tiene en cuenta su nivel de endeudamiento.
Desde este punto de vista, Santiago de Compostela es la ciudad gallega más viable desde el punto de vista de la autofinanciación, con un índice de cobertura del 94,9%, lo que significa que mediante tasas y el cobro de los servicios que presta es capaz de recaudar 94,9 euros por cada 100 euros que gasta en prestarlos y en pagar las nóminas de sus funcionarios.
Con un índice de cobertura superior al 90% también se sitúa la ciudad de A Coruña, que en el 2010 generó recursos propios por valor de 140,6 millones de euros, gastando 155,3 millones en personal y en el funcionamiento de los servicios municipales. No obstante, el presupuesto de este ayuntamiento fue muy superior a sus recursos propios. Superó los 211 millones, al obtener 71 millones más de transferencias corrientes y de capital, así como de financiación bancaria.
En un segundo nivel de sustentabilidad se sitúan las ciudades de Lugo y de Vigo, por este orden, pues ambas tienen un índice de cobertura superior al 85%. Por debajo de este umbral se sitúan el resto de las grandes ciudades: Pontevedra (83,8%) y Ourense (82,2%), ya que Ferrol es la única ciudad que no remitió sus datos presupuestarios al ministerio. Todos estos municipios están abocados a destinar más del 15% de su participación en los tributos del Estado a financiar sus gastos corrientes.
El Concello de Carballo cierra la tabla de las poblaciones más pobladas, en tanto que solo logra autofinanciar el 63,7% de las nóminas de su personal y de sus gastos corrientes. Tanto Narón como Vilagarcía y Oleiros muestran ratios de cobertura por encima del 70%, al igual que ocurre de forma más holgada con otras como Arteixo y Redondela.