Ferrovial y una firma participada por el Gobierno británico optan a las torres de Alvedro y Peinador

J. D. A. MADRID/COLPISA.

GALICIA

El Ministerio de Fomento tiene previsto liberalizar mediante una licitación en tres lotes el servicio de control de varias torres.

12 ene 2011 . Actualizado a las 02:47 h.

Ferrovial y NATS, la empresa de gestión de tráfico aéreo en la que el Gobierno británico controla un 49%, pujarán de forma conjunta por las torres de control que Aena quiere privatizar, entre ellas las de los aeropuertos gallegos de Peinador y Alvedro.

La firma española explicó este martes que su alianza -formarán un consorcio para competir en la licitación- reúne el conocimiento de la realidad de la gestión aérea y del funcionamiento de los aeropuertos nacionales con la experiencia internacional del gigante británico, que gestiona más de 2 millones de vuelos con 200 millones de pasajeros anuales en el mundo.

Licitación

El Ministerio de Fomento tiene previsto liberalizar mediante una licitación en tres lotes el servicio de control de torre de las instalaciones de Alicante, Valencia, Ibiza y Sabadell (lote 1); Sevilla, Jerez, Vigo, A Coruña, Melilla y Cuatro Vientos (lote 2); y Lanzarote, Fuerteventura y La Palma (lote 3).

Al anunciar el proceso, José Blanco aseguró que la privatización permitirá rebajar las tasas derivadas del control aéreo hasta un 15%, lo que, previsiblemente, haría más atractivos esos aeropuertos para el establecimiento de nuevas rutas, al tiempo que podría suponer una rebaja inducida en los billetes de avión.

Otras empresas

Junto a Ferrovial y NATS, otras empresas se han acercado a Fomento para interesarse por las torres de control, que se adjudicarán a través de un concurso abierto. Algunos de los candidatos son Clece, del grupo ACS; Navsa, de FCC; Tower ATS, de Indra, Saerco o Gesnaer.

Fuentes del sector aseguran que varias compañías públicas europeas de gestión aérea también quieren participar en el reparto. Por tanto, Gobiernos de otros países podrían tener influencia en la gestión del tráfico aéreo de los aeropuertos gallegos.

No obstante, hay que recordar que la responsabilidad de la organización de las rutas aéreas seguirá recayendo en Aena y que las maniobras de aproximación quedarían fuera de la política de liberalización que ha iniciado Fomento.