El primer temporal del otoño obliga a activar la alerta roja por lluvias

La Voz REDACCIÓN/LA VOZ.

GALICIA

El viento, que superó los 100 km/h en la costa, se llevó parte de la cubierta de un colegio en A Guarda

04 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La lluvia acumulada a lo largo del día de ayer en zonas del interior de Pontevedra y Ourense y la persistencia de las precipitaciones obligaron a la Dirección Xeral de Emerxencias a decretar la alerta roja en el noroeste y en el sur de la provincia ourensana, así como en el este de la de Pontevedra. Precisamente en el límite de esta provincia con Ourense se recogieron ayer cifras récord de lluvia, en el que constituyó el primer temporal del otoño. Así, en la estación de Fornelos de Montes se acumularon cerca de 200 litros por metro cuadrado, una cifra que duplica holgadamente el máximo anual registrado en esta zona -87 litros el 12 de enero de este año-. En otras estaciones próximas, la cantidad de lluvia osciló entre los 104 y los 163 litros por metro cuadrado, aunque fueron muchos los puntos que, en toda la comunidad, superaron los 50 litros.

Las intensas lluvias y las fuertes rachas de viento dejaron un reguero de incidencias en toda Galicia. Inundaciones, caídas de árboles, contenedores desplazados o volcados, cortes de luz temporales... A media tarde, el protagonista fue el viento, que dejó rachas superiores a los 100 km/h en las dos provincias atlánticas, especialmente en las zonas más próximas a la costa, así como en A Mariña lucense.

Las rachas fueron especialmente fuertes en la costa entre Vigo y A Guarda. Así, en la estación de Oia se registraron 145 km/h, el registro máximo de Galicia. La fuerza del viento fue la causa de los daños en el Teatro Principal de Tui. El edificio se encuentra en muy mal estado y hace dos años y medio perdió un tercio del tejado. Ayer prácticamente voló lo que quedaba y algunos escombros cayeron sobre una vivienda unifamiliar próxima, causando daños de escasa entidad.

También la cubierta del techo del colegio de primaria Rodríguez Sinde, en A Guarda, sufrió importantes destrozos. El viento levantó una plancha de unos 20 metros de largo y la enrolló, a modo de persiana, sobre sí misma. Según el alcalde de A Guarda, las clases estarán suspendidas hasta que se normalice la situación, informa Luis Collazo.

En A Coruña, el suceso más grave fue el desplome de parte de un andamio de un edificio en el paseo marítimo. El fuerte viento que azotó la costa a última hora de la tarde provocó el percance, que obligó a cortar al tráfico parte de la calzada durante varias horas.

El mal tiempo también causó destrozos en las oficinas que Rande Servicios Funerarios tiene en el municipio pontevedrés de Vilaboa, informa López Penide. En Pontevedra, las rachas de viento convirtieron un tramo de la carretera a Monte Porreiro en una carrera de obstáculos. Los vehículos tuvieron que sortear las piezas de plástico que delimitaban el paso de peatones.

El temporal en Ourense afectó especialmente a la comarca de Verín, informa Rubén Nóvoa. En los concellos de Vilardevós y Riós se cayeron varios tendidos eléctricos y pequeños núcleos de población se quedaron sin luz.