Los socialistas gallegos ponen en valor el cumplimiento de los compromisos adquiridos por Fomento con el AVE gallego en un momento de restricciones económicas. El portavoz parlamentario del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga, enfatiza que el protocolo pactado por Blanco y Feijoo «serviu para establecer unha colaboración frutífera, con máis de 1.000 millóns de euros de licitación». Pero el acuerdo emplazó para este ejercicio el grueso del esfuerzo, con más de 3.300 millones por licitar. En opinión de Leiceaga, «estanse a cumprir as previsións, aínda que é un ano máis complicado». En ese sentido, valora el avance en el tramo clave, el que conectará Lubián con Ourense, «onde se superaron algúns atrancos» que Fomento achaca a las objeciones ambientales de la Xunta.
El diputado socialista sostiene que corresponde al ministro precisar si los recortes de la inversión representan una amenaza para el AVE gallego, aunque defiende que Blanco participa de la «convicción de que lle toca a Galicia, malia que non son momentos de folgura en ningunha Administración». Leiceaga esquiva la comparación de la actual etapa de Blanco con la de su predecesora en Fomento, Magdalena Álvarez, a la que Touriño reprochó a su marcha de la Xunta haber guardado los proyectos del AVE gallego en el cajón. «Na anterior etapa houbo colaboración, pero con máis dificultade para convertela en obras», aduce con un punto irónico el socialista.
Respecto al calendario establecido en el pacto del Obradoiro para la conclusión de las obras y la llegada de la alta velocidad a Galicia, Fernández Leiceaga no teme, de momento, por el plazo político del 2015. «Teño todas as esperanzas de que poida cumprirse. Non hai nada que indique o contrario», esgrime.