Sin saberlo, se volvió famosa

GALICIA

Anne descubrió que un cómico alemán la incluyó en su libro sobre el Camino y ahora la «tratan como a Beckham»

10 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Hace unos nueve años que comenzó todo. Ella, Anne Butterfield, inglesa residente en Liverpool, pero nacida en Leeds, y él, Hans Peter Kerkeling, famoso presentador de televisión y cómico alemán, iniciaron el Camino de Santiago en Saint Jean Pied de Port. Cada uno por su lado, andando en paralelo, pero sin conocerse. «Los dos hacíamos la misma ruta, pero nos encontramos por primera vez en Logroño. Después, desde El Acebo, ya caminamos juntos», explicaba ayer la propia Anne dentro de la iglesia de Santa María la Real de O Cebreiro.

«Nos hicimos muy amigos, pero yo no sabía quién era él. No lo conocía. Me parecía un hombre normal, con el que podía hablar y con el que compartía la misma manera de ver las cosas. Teníamos un sentido del humor similar», recuerda. Aun así, había cosas que no le cuadraban, sobre todo el reconocimiento de aquel señor por parte de los demás caminantes.

«En Rabanal, cenamos juntos. Cuando yo volvía de los aseos, lo encontré escribiendo. Así que entonces le dije: 'Ya basta, ¿quién eres en realidad?». Y él le contestó: «Me llamo Hans Peter Kerkeling, pero me conocen por el nombre de Hape y soy un humorista muy conocido en mi país. Tengo además mi propio programa de televisión». Así se explicó Anne que, en La Faba, por ejemplo, un grupo de alemanes revolotearan alrededor del cómico, pidiéndole autógrafos y fotografías.

Éxito en todo el mundo

Descubierto el petate, continuaron caminando juntos hasta Santiago, también con Sheelagh, peregrina de Nueva Zelanda. Anne sigue manteniendo el contacto con Kerkeling y así supo que, recientemente, él ha publicado un libro sobre aquella experiencia a pie por el Camino de Santiago. En alemán sería algo así como Ich bin dann mal weg y, en español, idioma en el que también se puede comprar, vendría siendo Bueno, me largo.

Lo que ella desconocía es que forma parte de esa obra «sensacional mundialmente» (casi cuatro millones de ejemplares vendidos). Ahora que está haciendo el Camino por segunda vez, los alemanes la van parando «como si yo fuese David Beckham». «Me hablan casi con miedo y yo les digo que soy una persona normal. No soy nadie, solo una maestra de biología. Oh, no tengo experiencia en esto». Y así, sin comerlo ni beberlo, Anne Butterfield se volvió famosa.