El Parlamento luso pide al Gobierno que reabra las urgencias de Valença

GALICIA

El Ejecutivo de José Sócrates todavía no aclara si seguirá la recomendación, aunque la ministra es reacia

24 abr 2010 . Actualizado a las 20:18 h.

Si hubo algo que dolió en Portugal durante la campaña de protestas contra el cierre de las urgencias de Valença fue que los manifestantes utilizaran banderas españolas. Las enseñas rojigualdas aparecieron en todos los periódicos y televisiones portuguesas y, a pesar de que esa localidad de la ribera del Miño ni siquiera alcanza los 15.000 habitantes, se convirtió en un tema nacional. La oposición al Gobierno socialista aprovechó el tirón de las banderas y llevó el tema al Parlamento. Ayer se apuntó un tanto al lograr que la Asamblea de la República pida al Gobierno que reabra las urgencias de Valença.

El Ejecutivo de José Sócrates se quedó solo en la Cámara legislativa portuguesa. Toda la oposición se alió en torno a dos iniciativas, una del Partido Social Demócrata (PSD, de centroderecha), y otra del Centro Democrático y Social (CDS-PP, de derechas). Los grupos conservadores contaron con el respaldo del Bloque de Izquierdas, el Partido Comunista y Los Verdes.

Se trata de recomendaciones sin carácter vinculante. Piden la «suspensión inmediata» del cierre de los servicios nocturnos de urgencias de Valença, Melgaço, Arco de Valdevez y Paredes de Coura. Aunque con matices, porque la moción impulsada por el CDS-PP recomienda la suspensión temporal de los servicios nocturnos de emergencias, mientras que la del PSD reclama que al menos se paralice durante tres meses para que el Gobierno reevalúe sus intenciones. La decisión final la tiene el Gobierno.

Consultado por La Voz, el Ministerio de Sanidad portugués eludió concretar qué hará. «El Gobierno espera a que le sea remitida la comunicación oficial, porque todavía no la tenemos», explicó una portavoz. El Ejecutivo no se da plazos para estudiar la propuesta, aunque la ministra de Sanidad, Ana Jorge, ya se mostró semanas atrás dispuesta a no ceder y mantener el cierre de urgencias.

Único con protestas

El desmantelamiento de las urgencias de Valença es el único de los cuatro citados que ha tenido una fuerte contestación popular. Se produjo el 28 de marzo y desde entonces la comisión de pacientes del centro organizó protestas que llegaron a cortar el puente internacional que une Galicia con el país vecino y que llenó Valença de mil banderas españolas para agradecer a Galicia que les permitiera utilizar el centro de salud de Tui.

El cierre de las urgencias nocturnas aboca a los usuarios a tener que desplazarse a Monçao, a veinte kilómetros de distancia, si tienen una emergencia. Además, si la urgencia es grave y deben ser remitidos al hospital, Monçao queda más lejos que Valença del complejo asistencial de Viana. De ahí que los pacientes optaran por cruzar la frontera y desplazarse al centro de salud de Tui, a solo tres kilómetros, para las urgencias nocturnas.

Aunque el Servizo Galego de Saúde (Sergas) no ha detectado un aumento significativo del número de pacientes, el Gobierno luso amenazó a sus ciudadanos con cobrarles la atención sanitaria si van a Tui y utilizan la tarjeta sanitaria europea. Según el Ejecutivo portugués, eso sería un «uso fraudulento» del carné comunitario, que solo garantiza la asistencia en caso de que el ciudadano esté temporalmente en otro país.