En el juicio, que se celebrará el 27 de abril, se dirimirá la titularidad del campo de la fiesta que reclama como suya el Obispado de Lugo.
23 mar 2010 . Actualizado a las 13:38 h.Los vecinos de Ribadulla, en el municipio coruñés de Santiso, tendrán que esperar hasta el 27 de abril para acudir en el juzgado de Arzúa (A Coruña) a la vista preliminar a un juicio en el que se dirimirá la titularidad del campo de la fiesta que reclama como suya el Obispado de Lugo.
La acción judicial, según informaron a Efe fuentes vecinales, la promueve el Obispado para dilucidar en juicio lo que técnicamente se conoce como una «acción declarante de propiedad», que en un principio estaba programada para el próximo día 25, jueves.
Aunque la vista preliminar únicamente sirve para presentar las pruebas que se aportarán en el juicio, para el que también se fijará fecha, los vecinos de Ribadulla, -son 59 los denunciados-, que llevan más de un año enfrentados al Obispado, acudirán todos al juzgado de Arzúa, para evidenciar su unión.
La animadversión entre vecinos y clero se remonta a hace un año, cuando los parroquianos abortaron un intento de venta por parte del Obispado de la casa rectoral que también incluía el campo de la fiesta, que está enfrente del inmueble.
La oposición vecinal y el miedo que esgrimió el párroco de entonces, llevó al prelado de la diócesis, Alfonso Carrasco Rouco, a dejarlos sin misa y cerrar el templo.
El Obispado insiste en la titularidad del campo de la fiesta y ha demandado a todos los vecinos al instar una «acción declarante de propiedad» ante el juzgado de Arzúa.
Obispado y vecinos ya se encontraron en un acto de conciliación que concluyó sin avenencia. Allí, la diócesis reclamaba tanto la propiedad como el envío de un comunicado a varios periodistas y medios de comunicación en el que se debería dar cuenta de la resolución del acto conciliatorio, reconocer que los bienes pertenecían a la iglesia católica y que nunca había existido ningún chantaje.
Tal exigencia no se traslada ahora a la demanda, pero la diócesis de Carrasco Rouco sí persiste en reclamar la titularidad de los terrenos. Para ello, el obispado, exhibe una escritura, hasta ahora desconocida para los vecinos, del año 1967, cuando esta parroquia quedó parcialmente inundada por el embalse de Portodemouros.
Esta prueba la rebaten los habitantes de Ribadulla con documentación catastral a su nombre y una escritura pública donde se recoge la venta que realizaron habitantes de Ribadulla del campo de la fiesta a la asociación de vecinos.
Antes de acudir al juzgado de Arzúa, los vecinos de Ribadulla instalarán el próximo 3 de abril una carpa en el campo objetivo de litigio para celebrar su habitual reunión gastronómica de confraternidad vecinal.