El ministerio tiene propiedades de todo tipo en Galicia, desde aeródromos a polígonos de tiro
GALICIA
Las propiedades desafectadas que Defensa mantiene en Galicia son de todo tipo. De los más llamativos es el aeródromo de Rozas, en el municipio lucense de Castro de Rei, «para o que se barallaron proxectos de dinamización que sempre acabaron frustrados», recuerda el alcalde, Juan José Díaz Valiño, quien confía en que surja una iniciativa que saque la instalación del marasmo en que se halla, y del que solo lo rescata la actividad del Real Aeroclub de Lugo, que usa Rozas gracias a un acuerdo con el ministerio. Igual está el antiguo polígono de tiro de Bando, junto a Lavacolla (Santiago), de casi un millón de metros cuadrados, en el que el Ayuntamiento quiere crear un gran campo de golf público.
Otras propiedades militares se fueron al ámbito sanitario, que incorporó dos grandes centros hospitalarios. Tras años de tira y afloja, el Sergas compró en 1995 el Hospital Militar de A Coruña (ahora Abente y Lago) tras abonar 1.100 millones de pesetas. En el 2006 el ministerio y la Consellería de Sanidade suscribieron el convenio que integró el Hospital Naval de Ferrol en el complejo Arquitecto Marcide. El proceso es lento, y el Sergas espera un nivel de explotación del 50% en primavera.