Bloqueadas cuentas de la red de blanqueo en Suiza y las Bahamas

GALICIA

Investigan la relación del líder del grupo, el arousano José Lafuente, con narcotraficantes de Argentina

06 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

José Lafuente invertía los beneficios de muchos años de trabajo en diferentes cuentas que tenía abiertas en Suiza, Portugal y las Bahamas. Esos son los países a los que llegaron los agentes de la Guardia Civil que trabajan con el titular del Juzgado número 2 de Cambados en la investigación de una red de blanqueo en la que fueron detenidos ocho arousanos. Tanto el juez Juan Carlos Carballal como el grupo policial especializado que lleva tres años investigando al vecino de Ribadumia, que entonces cumplía condena por el secuestro de un pariente, vieron facilitada su labor por la extraordinaria colaboración que encontraron en los países en los que Lafuente ocultaba su dinero. De hecho, esas cuentas fueron bloqueadas en los últimos días para evitar que los familiares o socios del detenido pudiesen hacer movimientos en ellas.

Más complicada está siendo la investigación en Argentina. Lafuente también tenía abiertas cuentas bancarias en este país sudamericano, y se cree que el dinero allí invertido era producto de las operaciones de narcotráfico que en los últimos años llevó a cabo con los clanes argentinos, un país en el que aumentó considerablemente el tráfico de estupefacientes y del que parten buena parte de los barcos cargados de cocaína con destino a Europa. Pero fuentes de la investigación reconocen que esa relación del cabecilla de la red de blanqueo con las mafias argentinas está siendo más difícil de probar, ya que no encuentran en ese país la colaboración prestada en los demás canales internacionales con los que se establecieron contactos.

Tampoco se sabe de momento la cantidad de dinero que puede aflorar tras el rastreo de esas cuentas. Aunque en todas ellas hubo movimientos importantes que alertaron hace tiempo a las fuerzas de seguridad, la investigación por blanqueo puede dilatarse al menos un año, ya que queda por desmantelar el entramado del que se valió Lafuente para invertir los beneficios obtenidos, supuestamente, del tráfico de drogas.

Ni Nelo ni Radío

En principio, la investigación se centra en el entorno familiar de Lafuente y en las empresas con las que operaba. Sin embargo, al menos de momento no se sospecha de la participación de su hermano Manuel Lafuente en estos negocios. Nelo fue el primero de la familia detenido por su relación con el narcotráfico, y de hecho, se le condenó por la operación Temple, en la que se incautaron once toneladas de cocaína, el mayor alijo de esta sustancia intervenido en Europa.

Tampoco se sospecha de José Radío, el joven que en el año 2001 permaneció varios días secuestrado por haberse gastado el dinero de Lafuente mientras este hacía un viaje a Colombia en el que, según Radío, iba a cerrar una operación de narcotráfico. Cuando huyó de sus captores con una cadena al cuello, su padre le dijo que esperaba que le hubiese servido de escarmiento. Quizás ahora tenga otras compañías.