Los ensayos para la exhibición que prepara la élite de la Guardia Civil mañana en Baiona congregaron a más de medio millar de personas, que siguieron el espectáculo sin saber siquiera que se trataba solo de un simulacro. Ya de mañana, turistas y vecinos cambiaron rápidamente las toallas por las máquinas de fotos, atónitos cuando agentes de los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) irrumpieron a toda velocidad en la entrada del parador para abortar un intento de agresión a una autoridad.
Fueron los propios agentes los que tuvieron que explicar a los ciudadanos que solo se trataba de un simulacro, porque el realismo del operativo aportó una dosis doble de adrenalina al desayuno de los baioneses. Ya de tarde, ración triple, por tierra, mar y aire. El único camión con radar de la Guardia Civil en Galicia detectó cerca de la costa una embarcación sospechosa y se puso en marcha el protocolo. Un centenar de agentes con helicópteros, patrulleras y el equipo especialista en amenazas nucleares neutralizaron al terrorista de la embarcación.
La exhibición complementa al curso de verano que por primera vez se desarrolla en Galicia y que reúne a un centenar de altos mandos de 40 países.