Portugal blinda su AVE a Galicia y avisa de que demolerá lo que se construya alrededor del trazado

GALICIA

03 feb 2009 . Actualizado a las 02:13 h.

El Gobierno portugués acaba de traducir administrativamente el acuerdo de impulso que junto al Ejecutivo español acordaron dar al AVE Vigo-Oporto en la reciente cumbre de Zamora. El Consejo de Ministros luso ha declarado intocables sendas franjas de un kilómetro de ancho entre Braga y Valença do Minho entre las que se decidirá el recorrido definitivo del futuro tren rápido.

Durante dos años, prorrogable a un tercero, la Rede Ferroviária Nacional portuguesa tendrá prácticamente libertad absoluta para embargar o demoler toda cuanta construcción se lleve a cabo sin su permiso o contra su opinión en los corredores por los que el Ministerio de Obras Públicas y Transportes portugués está estudiando canalizar el tren rápido a Galicia.

El Gobierno de José Sócrates quiere manifestar con dicha medida la relevancia que otorga al proyecto que debería estar en funcionamiento durante el 2013, pese a que tanto a un lado como al otro de la frontera todavía no está decidido el trazado exacto por el que discurrirá el AVE entre Vigo y Braga.

La afección decidida por el Ejecutivo luso trata de «evitar que se pueda comprometer la concreción del enlace Oporto-Vigo, hacerlo más difícil y oneroso o alterar la posibilidad de ejecución de esta infraestructura». El Consejo de Ministros defiende incluso la singularidad de la medida y sus advertencias coercitivas argumentando que los perjuicios sociales y económicos que pueda causar en la franja de 76 kilómetros entre Braga y la frontera -con numerosas viviendas afectadas- son menores a los que se pudiera acarrear al proyecto si no se preserva el estado actual de los terrenos elegidos.

Zonas afectadas

Las afecciones de la citada resolución, que ya entró en vigor el pasado 28 de enero, incluyen la reconstrucción y ampliación de edificaciones e incluso la tala de árboles o alteración del suelo en las zonas afectadas.

Estas parten de Braga -dado que el tramo entre esta ciudad y Oporto discurrirá por el actual trazado en una primera fase- para seguir hacia Galicia con dos alternativas al superar el río Cavado, una interior hacia Ponte da Lima y otra más cercana a la costa, que confluyen en Coura y, tras una pequeña doble opción antes de la frontera, concluye al este de Valença, donde deberá construirse un nuevo puente sobre el Miño cuyo diseño será objeto de un concurso internacional.