Julio, agosto y, sobre todo, octubre, fueron los meses que registraron un mayor número de víctimas mortales, en un año donde se disparó la cifra de muertos en atropellos. La DGT, sin embargo, destaca el descenso del número de víctimas en los accidentes ocurridos en las vías interurbanas de Galicia.
05 ene 2009 . Actualizado a las 21:43 h.En el año que acabamos de despedir, Galicia vivió la misma sangría de años anteriores, los accidentes, que elevaron el número total de víctimas mortales a 215. Esta cifra, recabada y documentada en una mapa realizado por Lavozdegalicia.es, creció, sobre todo, debido a uno de los males endémicos del tráfico en la comunidad, los atropellos, que se llevaron por delante a 33 peatones. En territorio gallego se produjeron más del 13% de los arrollados de toda España, mientras que su población sólo representa el 6% de la nacional, lo que da muestra de la incidencia de estos sucesos.
Como prueba de estos datos trágicos se podría destacar, además, el caso de Vilagarcía, donde se produjeron 40, que costaron la vida a un total de cinco habitantes. En las últimas jornadas, incluso, se ha conocido que el concello arousano pretende limitar la velocidad a 30 kilómetros por hora la velocidad a todos los vehículos que circulen por el casco urbano para intentar reconducir la situación.
Octubre, el peor mes
Según la información recogida en el mapa de accidentes mortales en Galicia, octubre fue el mes en donde se registró una mayor siniestralidad, tanto en el número de fallecidos en accidentes (27 personas) como con respecto al número de atropellados, un total de seis. Aunque el mapa recoge víctimas de todas las edades y señala accidentes ocurridos tanto en vías urbanas como interurbanas, los datos de siniestralidad apuntan a que el peatón con más riesgo de ser atropellado en Galicia es un hombre o mujer de avanzada edad que vive en el rural y que transita por vías poco adaptadas -en muchos casos sin aceras o arcenes- y mal iluminadas.
Por otra parte, y junto al ya mencionado octubre, dos de los meses con una mayor siniestralidad fueron los propios de verano, julio y agosto, donde se registró un número de fallecidos parejo, 22, en contraposición a marzo, el mes con menos accidentes mortales, donde tan solo se contaron 11 fallecidos.
Grandes áreas metropolitanas
Un simple vistazo al mapa da idea de dónde se produjeron más accidentes mortales, en el eje atlántico de la comunidad, y más concretamente, en las áreas metropolitanas o en los círculos que rodean a las dos grandes ciudades gallegas. En el caso de A Coruña, localidades como Coirós o Bergondo suman varios siniestros, mientras que en el de Vigo, Mos o, sobre todo, Porriño, acumulan el balance más trágico.
Camino de la costa, las vías de Salnés y Barbanza también sufrieron varias víctimas. Además, y mientras que tuvieron tugar las obras de desdoblamiento de la antigua Vía de O Barbanza, las carreteras alternativas a esta última también fueron escenario de varias colisiones mortales, como ocurrió en el caso de Dodro.
Más arriba, una zona que repite en el mapa y que golpea con gran intensidad a los jóvenes, es la de la comarca Terra do Xallas, donde las cruces se suelen contar por partes, ya sea en Santa Comba o Mazaricos.
En el interior, fue la N-120 la que acumuló más accidentes, con áreas especialmente golpeadas, como la que conduce desde Lemos y Quiroga hasta la comarca de Valdeorras.
Nota aclaratoria: el número de fallecidos puede no coincidir con el oficial de la DGT al registrar el organismo oficial tan solo aquellos accidentes ocurridos en vías interurbanas.