Una planta especial de la Xunta triturará cada año 22.000 toneladas de neumáticos

Luís Villamor

GALICIA

01 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Hacer desaparecer un neumático constituye un problema, y no precisamente baladí. En Galicia, 40.000 toneladas se hacinan en la planta de Sogarisa, en As Somozas, que ha adquirido el compromiso de eliminarlas por completo en el año 2010. Galicia genera anualmente unas 22.000 toneladas de gomas usadas de coche, que la Consellería de Medio Ambiente quiere reciclar mediante la construcción de una nueva planta, que las triturará para separar sus diferentes componentes (entre ellos, el acero). El Gobierno gallego invertirá en este proyecto una partida global de unos cinco millones de euros.

En España se generan anualmente más de 250.000 toneladas de neumáticos usados, de las cuales el 45% se depositan en vertederos controlados sin tratar; un 15% se trasladan después de ser trituradas; y el 40% carecen por completo de control.

Ubicación definitiva

El Consello de la Xunta ha dado ya el visto bueno a la construcción de la planta de tratamiento de neumáticos, aunque todavía está pendiente de decidir su ubicación definitiva. Los materiales obtenidos se usarán para reponer la capa asfáltica de las carreteras (la calzada de la autopista AP-9, por ejemplo, lleva un porcentaje de neumáticos), lo que contribuye a reducir la extracción de áridos, y a mejorar la seguridad de las vías de comunicación.

También se aprovechará este producto para la instalación de las superficies de canchas de tenis, losetas de parques infantiles o bandas de retención de tráfico.

Pendiente de funcionamiento

Mientras no se construye la nueva planta aprobada por el Consello de la Xunta, las actuales instalaciones de Sogarisa deberán acometer el triturado del acumulado histórico de neumáticos, que serán reutilizados para drenajes, aislamientos acústicos, césped artificial y pistas de atletismo. Sogarisa asegura que el arranque de este proceso, que se desarrollará hasta el 2010, está pendiente. La planta debería haberse puesto en funcionamiento este pasado verano, según las previsiones oficiales, pero se encuentra a la espera de algunos trámites administrativos. En estos momentos, los neumáticos se concentran en una parcela del Instituto Galego da Vivenda e Solo, en As Somozas.

En Galicia las estimaciones apuntan a que se generan unos ocho kilos de neumáticos fuera de uso por habitante y año, un nivel muy superior al del conjunto del Estado español, que apenas llegaba a los seis kilos el año pasado.

Población dispersa

La dispersión poblacional juega un papel relevante en el desgaste de los neumáticos. Los desplazamientos diarios para ir al puesto de trabajo desde poblaciones rurales, a veces por pistas forestales, guardan relación directa con el desgaste de las gomas de los vehículos.

Las estimaciones de recogida de neumáticos hasta el 2015 colocan por delante a la provincia de Pontevedra, en donde este año quedarán fuera de uso 8.575 toneladas de gomas de automóvil. Le siguen la demarcación de A Coruña, con 7.793, la de Lugo, con 2.909, y la de Ourense, en la que habrán de recogerse 2.860 toneladas.

Apoyo de los ecologistas

El secretario ejecutivo de Adega, Finso Eirexas, está de acuerdo con la planta de tratamiento de neumáticos de la Xunta, e incluso observa que fue una sugerencia de los ecologistas, porque si ellos no hubiesen presionado, a lo mejor todavía se estarían quemando neumáticos de forma sistemática.

Eirexas se refirió también a una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, que anuló una concesión municipal a la cementera Cosmos, en donde se trataban unas 6.000 toneladas anuales de gomas de automóvil. El dirigente ecologista se mostró partidario, por otra parte, de la reutilización de los neumáticos usados y de su reciclaje. En su opinión, solamente como último recurso habría que recurrir a la incineración. «Se os enviamos a Zambia ou Senegal, estariamos xerando outro problema», advirtió. En algunos países, la concentración masiva de neumáticos usados sirve de nido a roedores e insectos, que transmiten enfermedades graves. Eirexas no tiene constancia de que de Galicia salgan neumáticos hacia esos países. Sí recuerda que en alguna ocasión se enviaron a Cuba, «como aportación contra o bloqueo» impuesto por Estados Unidos a la isla.