Diez kilómetros de ruta obligada hasta el cíber para una gestión

GALICIA

30 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

En el Concello lucense de O Páramo, los términos ADSL o banda ancha suenan a ciencia ficción. Sus vecinos sueñan con una velocidad de un mega mientras trabajan con una conexión de 56 kilobytes, una línea tan lenta como desesperante. Esta carencia se visualiza de forma muy especial en el Concello, imposibilitado para hacer múltiples gestiones con el resto de las Administraciones por no contar con un acceso a Internet de calidad. «No podemos dar muchos servicios a los vecinos, como el último de la intranet de la Diputación o el punto de información de Traballo, por este problema. Los organismos nos llaman para ofrecernos mejoras y cuando les informamos de la conexión que tenemos ya nos dicen de inmediato que es imposible instalarlos», asegura Xosé Manuel Fernández, funcionario municipal.

Las limitaciones de la línea actual quedan de manifiesto cuando se descargan datos de fincas del Sigpac (el sistema cartográfico de la Xunta). «En el mejor de los casos tardamos en visualizar la foto. Cuando nos aparece sin errores, pasan varios minutos y cuando hay problemas de conexión tenemos que tener mucha paciencia para descargar algún plano», relata con resignación Xosé Manuel Fernández. Los vecinos que necesitan algún documento de manera urgente tienen que recurrir a bajarlo de un cíber de las localidades de Láncara o Sarria, aproximadamente a unos diez kilómetros de O Páramo. «No nos queda otra alternativa que recomendarles eso para cumplimentar algún trámite que tienen que solventar de manera inmediata. Como el impreso pese mucho o la conexión no esté perfecta ese día es el único recurso», asegura.

En este caso no se puede decir que el Concello que preside Gumersindo Rodríguez no se haya cansado de pedir una mejora en las comunicaciones. El alcalde se lo pidió a Telefónica en el 2005 y todavía hoy no ha recibido respuesta. Eso sí, según las promesas de la Administración autonómica, en el 2004 tendrían que tener acceso a banda ancha los núcleos grandes del Ayuntamiento y en el 2006 la totalidad. Tres años después, la situación es la descrita.