El PSOE y el BNG rompen su tregua por una comparecencia de Touriño

GALICIA

El Gobierno elevará al Parlamento un nuevo paquete de medidas contra la crisis económica.

19 nov 2008 . Actualizado a las 11:24 h.

La pax bipartita alcanzada hace dos meses por los socios del Gobierno autonómico para afrontar sin tensiones el tramo final de la legislatura fue puesta a prueba ayer en el Parlamento gallego, donde el PSOE y el BNG protagonizaron un agrio enfrentamiento, que tuvo al PPdeG de testigo, con motivo de una comparecencia solicitada por el presidente de la Xunta para dar cuenta de la situación económica y el nuevo paquete de medidas que pondrá en marcha el Ejecutivo para hacer frente a la crisis. El incidente provocó que los nacionalistas rompieran la tregua con sus socios y se aliaran a los populares para trastocar el esquema de la comparecencia de Touriño.

La discusión se produjo a puerta cerrada en el seno de la junta de portavoces, donde se reúnen los jefes de los grupos políticos, el Gobierno y la Mesa de la Cámara para fijar el orden del día de los plenos. Lo normal es que las sesiones plenarias se inicien siempre con el debate de los textos legislativos, pero esta vez el portavoz socialista, Ismael Rego, solicitó una pequeña alteración de la agenda para sustanciar en primer lugar la intervención del presidente.

El nacionalista Carlos Aymerich se opuso radicalmente a introducir variaciones, aduciendo que el presidente debería recibir el mismo tratamiento que cualquier otro diputado o miembro del Ejecutivo.

«Estos no tragan»

El propio director xeral de Relacións Parlamentarias, Varela Flores, representante del Gobierno en la reunión, advirtió a Rego que «estos no tragan», en alusión al Bloque, y el portavoz popular, Manuel Ruiz, vino a complicar más las cosas cuando se alineó con el BNG para vetar cualquier alteración del orden del día plenario. La presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, hizo una llamada a la «reflexión», pero el portavoz del Bloque se mantuvo firme, pues si accedía a las pretensiones del PSdeG los principales sacrificados serían el vicepresidente Anxo Quintana y los conselleiros nacionalistas, alguno de los cuales vería sus intervenciones aplazadas hasta la tarde.

El PP, por su parte, hace su propia lectura del incidente, y sostiene que en realidad por lo que pugnaron el PSOE y el BNG es por el prime time parlamentario, pues el político que asegura una intervención por la mañana tiene más posibilidades de proyectar su discurso y colarlo en la parrilla del Telexornal. La de Touriño, esta vez, tendrá lugar por la tarde.