Las autopistas de la Xunta instalarán este verano las cabinas de telepeaje

GALICIA

03 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El sistema de peaje dinámico, que permite al usuario de la vía abonar el importe de la tarifa sin necesidad de detener el vehículo, quedará generalizado este verano en todas las autopistas gallegas, con la instalación de cabinas provistas de ese dispositivo en los dos viales de pago que son titularidad de la Administración autonómica: A Coruña-Carballo (AG-55) y Vigo-Val Miñor (AG-57). La sociedad concesionaria -Autoestradas de Galicia- tiene previsto realizar las obras necesarias entre los meses de julio y agosto, y de forma simultánea en las dos autopistas, a pesar de que en la AG-57 tenía 15 meses de plazo para una instalación que estaba vinculada a la reforma de la vía que permitirá la comunicación interna de la comarca del Val Miñor.

Así estaba previsto en el decreto que el Consello de la Xunta aprobó el pasado 17 de abril para autorizar un convenio entre la Consellería de Política Territorial y la concesionaria de la AG-57 con las condiciones para completar los actuales enlaces parciales de Sabarís, A Ramallosa, Nigrán y Porto do Molle. Según el convenio, esas obras permitirán que los enlaces puedan ser utilizados también para los desplazamientos interiores entre los municipios de Nigrán, Gondomar y Baiona, y no únicamente para su comunicación con Vigo, como sucede en la actualidad.

Sin embargo, Autoestradas de Galicia no esperará a esa reforma y proyecta colocar este verano el sistema de telepeaje en las dos vías que gestiona. La decisión de afrontar esa instalación en los meses estivales responde a la previsión de la concesionaria de que ese calendario minimizará los contratiempos para los usuarios de la vía de pago.

OBE

El sistema de cobro por telepeaje, denominado OBE por su nombre inglés on board equipment, funciona a partir de la colocación en el vehículo de un transmisor que facilita la lectura informatizada de los datos del cliente y el pago a través de su cuenta bancaria. Para ello, los usuarios tienen que pasar, a una velocidad limitada a 40 kilómetros por hora, por unas cabinas situadas en el extremo del área de peaje y señalizadas con una «T». La AP-9 incorporó esta modalidad de pago en abril del 2003; y la AP-53 (Santiago-Dozón), en julio de ese año. El sistema ya ha sido adoptado por un elevado número de usuarios. En la primera vía de pago de Galicia, lo utilizan el 37%.