El debate de la autonomía pulsa la capacidad del bipartito para influir en la política del Estado
GALICIA
El fracaso de la reforma del Estatuto y la capacidad del bipartito gallego para influir en la política del Estado son dos de los grandes asuntos que marcarán el debate sobre el estado de la autonomía, que hoy arranca en el Parlamento. El tratamiento recibido por Galicia en los Presupuestos Generales, el freno al traspaso de nuevas competencias o incluso la propuesta soberanista de Ibarretxe serán elementos que planearán sobre un debate que el presidente Touriño aprovechará para ofrecer un pacto a todos los grupos con el fin de abrir una nueva etapa de impulso del autogobierno gallego.
La intervención del jefe del Ejecutivo ocupará toda la jornada matinal del debate, en la que Touriño esbozará las líneas estratégicas para los veinte meses que restan de legislatura, planteando tres grandes acuerdos políticos: uno para la ordenación del territorio, otro para recomponer el consenso sobre la lengua gallega y, por último, otro para responder al fracaso del Estado con un nuevo impulso al autogobierno.
El último de estos asuntos centrará en gran medida el debate, pues el número dos del Ejecutivo y líder del BNG, Anxo Quintana, expondrá la necesidad de superar «a situación de impasse» en las relaciones de Galicia con el Estado, sobre todo una vez que el Gobierno de Zapatero decidió cerrar las puertas a transferencias capitales como la del tráfico, y demorar otras muchas.
Por su parte, el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijoo, intentará mostrar al bipartito gallego como aliado de los planes soberanistas de Ibarretxe, aludiendo al encuentro que éste mantuvo el domingo con Quintana en el marco del Alderdi Eguna, la fiesta del PNV. El PP también dibujará a un bipartito que se ha ocupado más de solventar sus pugnas internas que de los intereses de Galicia.