La campaña del «Prestige» revisará si la popa del buque sigue estable

P. González / M. Blanco

GALICIA

La embarcación base llega hoy a la zona del hundimiento y mañana comenzará las pruebas de profundidad

03 sep 2007 . Actualizado a las 03:03 h.

Misión: explorar la popa. La campaña de inspección del Prestige que mañana comenzará en la zona del hundimiento, a unos 220 kilómetros de la costa gallega, centrará buena parte de sus esfuerzos en comprobar si la popa del petrolero, que alberga aún 700 toneladas, sigue estable. El buque base Siem Danis , a bordo del cual viaja un grupo de técnicos y los dos robots submarinos que jugarán un papel clave en el operativo, llega hoy al punto del naufragio y está previsto que inicie las pruebas de profundidad mañana.

La fijación de los responsables de la misión por la popa hundida no es baladí. En los trabajos de extracción del fuel que acometió Repsol en octubre del 2004 apenas se pudo trabajar sobre este pecio debido a que se encuentra en una pendiente de difícil acceso y a que en aquellos días las condiciones meteorológicas complicaron todavía más las tareas. En aquel operativo, la intención de los técnicos era eliminar las 700 toneladas de fuel que había en los tanques a través de un proceso de biorremediación que, finalmente, no se pudo llevar a cabo.

Por contra, las labores de extracción en la proa (que se encuentra a un kilómetro de distancia de la popa y en un lecho marino llano a 3.830 metros de profundidad) resultaron un éxito, hasta el punto de que se retiraron 14.000 toneladas de petróleo. En la actualidad, los tanques de esta sección albergan entre 300 y 400.

Ahora, la inspección de los robots se centrará en supervisar las fugas de la popa, que en cualquier caso son, a juicio de los técnicos, de poca envergadura. Se calcula que de los dos pecios salen cada día unos 50 litros de carburante.

Los técnicos quieren determinar si la estabilidad de la popa se ha visto alterada no sólo porque se encuentre en una pendiente, sino también porque esta sección del petrolero hundido cuenta con el tanque que más fuel conserva de todos, un depósito central con 500 toneladas en el que apenas se pudo trabajar por las circunstancias mencionadas.

Actuación especial

En el caso de que las fugas que aún salen a diario del petrolero procedan de este tanque, los técnicos podrían plantearse recomendar algún tipo de actuación especial sobre este depósito.

Además de los trabajos de inspección, los robots tomarán varias muestras del fuel que aún emana de los tanques. En base a los resultados que se obtengan, Repsol -que se encarga nuevamente de la misión- realizará informes que posteriormente remitirá al Gobierno para su análisis.

Si todo discurre según el plan previsto y las pruebas de profundidad que se ejecutarán mañana no dan problemas, los tareas de inspección de los dos robots contratados comenzarán el miércoles y se prolongarán a lo largo de otros diez días, «siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan», según precisan desde el Ministerio de la Presidencia.