El cálculo se hará sobre 3,6 millones de toneladas de áridos y 1,4 de cuarzo El ADIF reservó 80 millones para todas las expropiaciones de la línea Ourense-Santiago
21 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.?ras el golpe de efecto de la reunión del miércoles, en la que el Gobierno utilizó datos de la propia empresa de Juan Miguel Villar Mir para demostrar el escaso impacto que el AVE tendrá sobre la mina de Serrabal, los técnicos del Ministerio de Fomento y del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) iniciarán el expediente para compensar al empresario, una indemnización que se limitará al mineral que la línea de alta velocidad Santiago-Ourense impedirá extraer en el yacimiento. No se trata de una expropiación en sentido estricto, pues el yacimiento pertenece a todos los españoles y está siendo explotado en régimen de concesión. No obstante, el régimen expropiatorio no sólo prevé la adquisición de bienes por parte del Estado, sino también de derechos. Y este sería el caso de la mina de Serrabal. A Ramsa -empresa de la que el Grupo Villar Mir tiene dos tercios y el Grupo Guerrero el resto- se la indemnizaría por el derecho sobre la explotación de la mina, pero limitado a los cerca de 80.000 metros cuadrados del filón de cuarzo que estaría afectado por el paso del AVE. Para el cálculo de la compensación se tomará como base el Informe pericial de la afección a la C. E. Serrabal , realizado durante cuatro años por un equipo multidisciplinar de la Universidad de Oviedo dirigido por Daniel Arias, decano de la Facultad de Geología. Límite Aunque de momento no se maneja una cifra concreta, es necesario recordar que el ADIF reservó 80 millones de euros para todas las expropiaciones de la línea de alta velocidad Santiago-Ourense. En cualquier caso, los 895 millones de euros que se reflejaron en una alegación contra el trazado actual presentada a principios del 2004 por Ramsa quedarán lejísimos de lo que finalmente ingrese la empresa por la afección a sus derechos sobre la mina. Los propios directivos de la firma reconocieron recientemente que la cifra incluida era para «asustar». Por lo que parece, ni siquiera ellos se la tomaron en serio. En la reunión celebrada en A Coruña el miércoles hubo un intento para que la Xunta organizara un encuentro con Villar Mir y los sindicatos de cara a un eventual compromiso público del empresario para garantizar los puestos de trabajo tanto en Serrabal como en las plantas de Ferroatlántica. Sin embargo, parece que de momento esta posibilidad ha sido descartada.