Discutirá con los sindicatos esta opción, aunque no estaba prevista en sus informes En última instancia será Villar Mir quien debe decidir si esta alternativa es rentable
19 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) afronta hoy la reunión técnica con los sindicatos representados en el comité de empresa de la mina de Serrabal y Ferroatlántica en un contexto muy diferente al momento en que fue convocada, hace quince días. La puerta que había dejado abierta el presidente del ADIF, Antonio González, a un posible cambio de trazado en el tramo Vedra-Boqueixón del AVE Santiago-Ourense -si se demostraban efectos en los puestos de trabajo- fue cerrada de golpe por la ministra de Fomento en su visita del pasado viernes, cuando volvió a descartar una modificación del itinerario elegido. Si el cambio de trazado es una opción cada vez más remota, fuentes gubernamentales de la negociación ven en principio con buenos ojos la posibilidad de compatibilizar la extracción minera con el actual proyecto ferroviario, a pesar de que no estaba contemplada en sus informes sobre el contencioso. Así, estudiarán «con interés» la propuesta que los sindicatos pondrán hoy sobre la mesa, consistente en llevar a cabo una explotación subterránea de los bancos de cuarzo afectados, un proyecto en el que están trabajando desde hace algún tiempo expertos de la Universidade de Vigo. No obstante, consideran que la última palabra en este asunto la tendrá la persona que explota el yacimiento en régimen de concesión, el empresario Juan Miguel Villar Mir. Aunque en principio es necesario valorar en qué condiciones de compatibilidad se podría llevar a cabo esta actividad extractiva -por ejemplo, a qué profundidad debería situarse con respecto a la plataforma ferroviaria-, diversas fuentes confirmaron ayer que las dificultades técnicas no son insalvables. «Si es factible y compatible con el proyecto, no habría problema por nuestra parte. Queda la duda de si Villar Mir aceptará esa propuesta, pues tendrá mayores costes de producción», aseguran. Por tanto, tanto el ADIF como los sindicatos jugarían en principio cómodos en la tierra de nadie que representa la extracción subterránea, frente a la posibilidad de enrocarse en la discusión de un cambio de trazado que podría resultar estéril. La posición radicalmente contraria a la modificación del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y la propia Magdalena Álvarez -quizás por la presión del jefe del Ejecutivo gallego- harían muy difícil un giro en este asunto. «Creen que el informe de la Universidad de Oviedo es el más riguroso y no conciben de momento un escenario diferente», explican fuentes de la negociación. Director de Proyectos Para valorar la compatibilidad de la extracción en profundidad con la línea de alta velocidad, entre otros aspectos, el director general de Proyectos del ADIF, José María Pérez Fabregat, será uno de los miembros de la comitiva que acompañará a Antonio González en la comisión técnica que hoy discutirá la afección a la mina. Expertos consultados insisten en que no tiene por qué haber grandes obstáculos para la coexistencia del tren y la mina, y recuerdan que el túnel del AVE, en Barcelona, está prácticamente pegado al del metro.