Touriño censura a Villar Mir por usar el AVE para amenazar con despidos

Serafín Lorenzo SANTIAGO

GALICIA

Reitera que Galicia no puede tolerar retrasos como el que supone alejar el tren de la mina El ADIF explicará el martes a sindicatos y Xunta el informe sobre el tramo de Serrabal

31 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El Gobierno gallego ha soportado dos años de fuertes presiones en favor de un cambio de trazado del ferrocarril de alta velocidad a su paso por la mina de cuarzo de Serrabal, en el municipio de Boqueixón, hasta dar un golpe en la mesa y reprobar al empresario que gestiona el yacimiento, Juan Miguel Villar Mir, que utilice el AVE para lanzar «ameazas» o «advertencias» sobre un posible cierre de la explotación o el despido de trabajadores. Emilio Pérez Touriño apuntó ayer que los informes de los que dispone Fomento, que desaconsejan el cambio de trazado que pide el empresario por el retraso que implicaría en las obras, sitúan la afección real del trazado en el 10% de la mina, por lo que consideró preciso apelar a que nadie «aproveite nada nesta historia». Apostilló que «as ameazas, entre comillas, ou, deixémolo suave, as advertencias dalgún empresario respecto a despidos ou peches... Estamos en democracia, hay que respectar aos traballadores e ao emprego e andar con coidado», advirtió en referencia a Villar Mir. El presidente de la Xunta se mostró muy prudente, ante las preguntas de los periodistas, sobre la nueva ratificación por parte de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, de que no se cambiará el trazado del AVE para alejarlo de la explotación. Además de reprobar la actitud del empresario en este asunto, Touriño se limitó a abundar en el mensaje que la Xunta siempre ha defendido -en contraste con la ambigüedad de Fomento- de que Galicia «non se pode permitir retrasos significativos no AVE» y, al mismo tiempo, se debe garantizar la continuidad de los empleos. Los técnicos manejan que mudar el trazado en Serrabal supondría una demora de más de dos años en la línea Santiago-Ourense, la única en Galicia diseñada para velocidades de 300 kilómetros por hora. Más allá de ratificar ese criterio, Touriño supeditó las valoraciones a la presentación el martes próximo, por parte del presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Antonio González, del informe en el que ese departamento dependiente de Fomento razona la afección real del paso del AVE en la mina y el retraso que conllevaría variar ese trazado. Touriño rehusó incluso pronunciarse sobre si esa nueva ratificación del trazado que el ex ministro Álvarez Cascos publicó en el Boletín Oficial del Estado en junio del 2003, después de rechazar dos alternativas, desbloqueará definitivamente las obras adjudicadas desde mayo del 2004 a Dragados y Tecsa. Recalcó que el responsable del ADIF se reunirá en A Coruña con los conselleiros implicados (Política Territorial, Industria y Traballo) y con todos los representantes de los sindicatos para exponer «con luz e taquígrafos» las conclusiones de ese informe. «Quen ten a responsabilidade nos debe explicar que supón modificar o trazado», resolvió. Fomento pierde dos años Antonio González tendrá oportunidad de trasladar el martes a los agentes implicados la misma decisión que él mismo ya comunicó a la prensa hace dos años y que la propia ministra Magdalena Álvarez corroboró un año después, en un encuentro con los periodistas celebrado en la Delegación del Gobierno. En aquella primera ocasión, el responsable del ADIF reveló la pretensión del empresario de percibir una indemnización por lucro cesante de 895 millones de euros, una suma que Villar Mir quiso justificar con un estudio de catedráticos la Universidad de Oviedo. La ministra refrendó doce meses después la intención de ejecutar la expropiación forzosa de los terrenos. Mientras, desde el Gobierno se filtró la posibilidad de ofrecer alrededor de 300 millones de euros. Villar Mir declaró en marzo a este periódico que su pretensión no es cobrar una indemnización, sino «salvar la mina». Reveló que ofreció a Fomento renunciar a cualquier compensación económica a cambio de modificar el trazado. Prórroga de la concesión Pero la Xunta guarda una baza de peso ante el empresario, que está pendiente de que la Consellería de Industria amplíe hasta el 2038 la concesión del yacimiento, que expira este año. Además, el propio Villar Mir tiene intereses en la línea del AVE que afecta a Serrabal. La empresa OHL, de la que es accionista mayoritario, ejecuta el tramo de acceso a Santiago, además de otras muchas obras públicas en Galicia.