Touriño impulsa proyectos con Brasil en pesca y nanotecnología

Serafín Lorenzo ENVIADO ESPECIAL | BRASILIA

GALICIA

Xoán Crespo

Abre vías con Lula da Silva para crear en el litoral brasileño una base para la flota gallega El presidente gallego sostiene que el margen de colaboración con el país carioca es amplio

19 mar 2007 . Actualizado a las 06:00 h.

Emilio Pérez Touriño y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sentaron ayer las bases para la cooperación de ese país en sectores estratégicos para Galicia, como la pesca, la nanotecnología y el desarrollo de los biocombustibles. En una audiencia que se prolongó durante 45 minutos, el jefe del Ejecutivo gallego también presentó, por indicación de Rodríguez Zapatero, el proyecto para tratar de dar utilidad al monte Gaiás como puente cultural con Iberoamérica. Tanto en este ámbito como en el resto, la reunión fue un punto de partida para posibles acuerdos de colaboración que aún habrá que negociar. El acto central del viaje de Touriño a Brasil obligó a la comitiva presidencial a realizar un viaje relámpago, en un vuelo charter fletado por la Xunta, desde Salvador de Bahía hasta Brasilia, la capital administrativa de la república. La presencia del presidente gallego concitó una considerable expectación mediática que Touriño apenas pudo satisfacer, ya que la entrevista con Lula da Silva tuvo continuidad en un encuentro inmediatamente posterior con su vicepresidente, José Alencar. Condicionado por esa agenda y sin tiempo para preguntas, el presidente se limitó a apuntar los asuntos tratados, después de agradecer la «hospitalidade e amabilidade» con que fue recibido. Valoró la audiencia por la «oportunidade para contextualizar e por en valor os extraordinarios vínculos de relación históricos e de futuro entre Galicia e Brasil, e a aportación da colonia galega a este país». Fortalecer lazos comúnes El sector estratégico en el que están más maduras las opciones de fortalecer esos lazos en beneficio del desarrollo de Galicia es el de la nanotecnología. Touriño anunció que el director del Laboratorio Ibérico Internacional de Nanotecnología de Braga, el lucense José Rivas, catedrático de la Universidad de Santiago, viajará próximamente a Brasil para avanzar en la firma de un protocolo de colaboración estable con un país especialmente interesado en este campo. El jefe del Gobierno autónomo aseguró en ese sentido que el margen de colaboración que se abre para Galicia es «moi importante». El otro sector en el que el acuerdo parece más viable es el pesquero. Touriño explicó a Lula da Silva el interés de los gobernadores de los estados de Pernambuco y Bahía para establecer en su litoral una base de aprovisionamiento logístico para los pesqueros gallegos que faenan fuera de aguas territoriales brasileñas pero que necesitan una plataforma operativa. «Para a frota pesqueira galega sería dun alto interese estratéxico», subrayó Touriño sobre la posibilidad de dar forma a un proyecto que «queda suxeito a estudios de viabilidade». En la urbe que Óscar Niemeyer dibujó hace medio siglo, y que en sólo tres años de obras se convirtió en el mayor centro administrativo de América, el presidente gallego presentó a Lula da Silva otro proyecto de ciudad, la de la Cultura, que después de seis años de trabajos todavía carece de un proyecto cerrado que asegure su rentabilidad. Touriño puso a su interlocutor al tanto de la idea de hacer del Gaiás «unha plataforma cultural entre Iberoamérica e Europa» y dejó sobre su mesa el interés de la Xunta por que Brasil participe de forma activa en esa apuesta. Antes de la entrevista con el premier carioca, el jefe del bipartito pudo agradecer al embajador en Brasil, Ricardo Peidró, las gestiones para celebrar esa audiencia. Touriño ya tiene la foto con Lula que buscaba.