LA MEXICANA MÁS DE MODA. El álbum «Limón y sal» ha catapultado a Julieta Venegas hacia los primeros puestos de las listas de ventas de Europa, Estados Unidos y México. «¿É DE quen ven sendo?». Eso es lo que se preguntarán hoy los vecinos de Arzúa tras conocer que Julieta Venegas, la cantante mexicana de moda y ganadora de un Grammy al mejor álbum alternativo por su último disco Limón y sal , se ennovió en su pueblo. O mejor, con un chico de su pueblo. El joven, que ya la acompañó este año en la ceremonia de los MTV latinos, es el mismo que cada año organiza en esa villa coruñesa la Festa do Queixo y hace años también la Festa dos Botes. Pero la conexión entre la mexicana y el gallego no fue el tequila. Fue la música. Porque el chico es Carlos Mariño, manager de Dover, Kiko Veneno, Los Planetas, Lory Meyers y Fangoria. La incógnita es ahora si Julieta ofrecerá conciertos en Arzúa como deferencia hacia su Romeo. Mientras sus compromisos se lo permitan, la joven podría pasar la Nochebuena en suelo galaico. Como antecedente está aquel sonado romance entre una chica de Guitiriz y el cantante de Immaculate Fools, Kevin Weatherhill, quien llegó a instalarse en ese concello de la provincia de Lugo. Y por no hablar del affaire que tuvo Alejandro Sanz en Foz cuando sus discos aún no le daban la suficiente plata como para tener casa en Miami.