La Audiencia Nacional condena a Sito Miñanco a casi 17 años de cárcel

No hubo sorpresas, sólo una ligera rebaja de la condena solicitada por el fiscal. Casi seis meses después del comienzo del juicio oral, la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional notificó ayer a José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco , una sentencia que lo condena a 16 años y diez meses de cárcel, y 390 millones de euros de multa, como autor de un delito contra la salud pública (tráfico de cocaína), en calidad de jefe de la organización. El resto de los juzgados fueron condenados por el mismo delito a penas que oscilan entre 11 y 16,5 años de cárcel, menos el abogado Manuel Jesús Pérez Lorenzo, al que le fue impuesta una pena de un año y nueve meses de prisión como autor de un delito de encubrimiento. Los hechos se remontan al verano del 2001 cuando el capo cambadés, condenado por un delito similar hace once años, fue sorprendido en un chalé de la periferia de Madrid mientras dirigía a través de un teléfono vía satélite la operación de trasvase de 4.480 kilos de cocaína que se estaba llevando a cabo a 1.000 millas de la Guayana francesa. La droga pasó del mercante Agios Constandinos, fletado por los colombianos, al viejo pesquero Tatiana, con bandera de Togo y fletado, a su vez, por la organización liderada por Sito Miñanco. Todo legal La sentencia es una prueba palmaria del fracaso del flamante equipo jurídico dirigido por el ex presidente del Tribunal Supremo, Federico Sáiz de Robles. La principal baza de la defensa era la supuesta existencia de un delito provocado, ya que el éxito de la operación policial fue posible gracias a la contribución de dos testigos protegidos que pusieron a la DEA americana al corriente de los planes de la organización colombiana a la que la banda de Sito Miñanco le había comprado el alijo. La sorpresa de los GEOS Esa colaboración fue lo que hizo posible que la tripulación original del mercante fletado por los colombianos fuese sustituida en alta mar por una dotación de los GEOS españoles que se identificaron como tales cuando ya habían sido trasvasados 40 fardos de cocaína al pesquero enviado por Sito Miñanco. «De la prueba practicada en el juicio oral -dice textualmente la sentencia- resulta evidente que no ha habido provocación del delito. Al testigo protegido 0109001/41, la organización criminal colombiana le propone la adquisición de un barco para el transporte de cinco toneladas de cocaína, sustancia que ya está en poder de la organización colombiana para ser distribuida en Europa y que ha sido pagada por miembros de la organización española, tal y como queda acreditado en los hechos probados».

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