El marisqueo gallego podría explotar la pulga de mar para la elaboración de paté

Bea Costa
Bea Costa DATA

GALICIA

10 oct 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

El acuícola es un sector en alza con muchas facetas por desarrollar. Los expertos apuntan a la necesidad de aportar ideas novedosas y la ingeniera alimentaria Natalia Carrillo ha dado un claro ejemplo de ello. Esta joven ha visto un gran potencial en las pulgas de mar y ha presentado una iniciativa que consiste en producir paté a base de esta especie: «Temos os recursos ó alcance da man e hai que aproveitalos», explicó en el Foro dos Recursos Mariños de O Grove. Natalia Carrillo ya ha puesto en práctica el proyecto y asegura que la elaboración de paté a base de estos crustáceos es viable. De hecho, llegó a contactar con una empresa de Vigo para llevar a cabo una experiencia piloto, pero la catástrofe del Prestige frenó el proyecto y ahora se plantea, junto con la Cofradía de Aldán, abordarlo en el marco de un plan experimental: «O proxecto é viable. As pulgas son comestibles e fáciles de coller. Agora o que hai que valorar son os stocks da especie para saber si é posible explotala e facer un estudio de mercado», dijo. Recolección Según su experiencia, una persona puede coger hasta 14 kilos de pulgas en hora y media. Para ello sólo hace falta un recipiente con un agujero colocado sobre la arena, un foco de luz en su interior que actúa como polo para atraer al animal y un arenal en que el abunde la especie. Y de acuerdo con la valoración que presentó a la empresa interesada, el kilo de pulga podría cotizarse entre 3 y 4,20 euros, suficiente para rentabilizar sus extracción. Natalia Carrillo optó por el formato del paté porque considera que es la forma más fácil de comercializar este producto en Galicia y España, si bien podría haber otras. «As pulgas son crustáceos, poderíanse chamar camaróns de area, pero chámaselle pulgas, e aquí non hai tradición de comer este tipo de especies. En México, por exemplo, consumen ata 512 tipos de insectos pero aquí non estamos acostumbrados». Pero no sólo las pulgas tienen posibilidades comerciales. Carrillo expuso en el foro el caso de las anémonas, desaprovechadas en Galicia y comestibles en el Levante y el golfo de Cádiz: «Esta especie poderiase comecializar como un precociñado, tipo croquetas». Otro ejemplo del aprovechamiento comercial de especies marinas por explotar en Galicia es el de las medusas que sí se consumen en Extremo Oriente. Todo esto puede sonar extraño, por no decir escatológico, pero «aí temos o antecedente das algas», concluyó Carrillo.