Vuelve el anticiclón, los cielos sin nubes y las temperaturas al alza

Montse Carneiro REDACCIÓN

GALICIA

La intensidad del viento aconseja buscar playas orientadas al sur El aire húmedo del norte dejará nubes de estancamiento en la costa cantábrica de A Coruña y Lugo

03 jul 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

Primera semana de julio, el verano se adentra en Galicia y los cucos enmudecen. Los pregoneros de la primavera emprenden viaje hacia sus cuarteles de invierno africanos, más allá del Ecuador. Tres mil kilómetros de vuelo en solitario y sin escalas sobre los trópicos y el desierto. En marzo del 2004 volverán. En la dirección contraria, las bajas presiones norteafricanas suben hasta la Península y dejan tormentas en todo el Mediterráneo. Galicia queda lejos y se libra de la lluvia y la inestabilidad, pero no del viento. Soplará del norte y con intensidad moderada en toda la costa de Ribadeo al Miño, así que quienes aprovechen el fin de semana para irse a la playa que se orienten bien si no quieren confundir sus sombrillas con cometas voladoras. Arenales abrigados mirando al sur, esos serán los mejores. De la borrasca al anticiclón La situación de la atmósfera ha dado un vuelco en los últimos cinco días. El pasado domingo, una borrasca muy profunda de 970 milibares, que acabó situándose entre Galicia e Irlanda, demasiado al sur para esta época del año, sumió a la comunidad en un estado de invierno puro. Las lluvias alcanzaron los 40 milímetros y permitieron cerrar el mes de junio con valores de precipitación similares a las medias climáticas. Hoy, en cambio, cinco días después, el tiempo en Galicia está dominado por el sistema opuesto a la borrasca: las altas presiones de Azores, el anticiclón, una región muy estable donde la presión atmosférica es más alta que en las regiones vecinas y en la que el aire tiende a descender, inhibiendo la formación de nubes. Nubes de estancamiento El anticiclón está situado al oeste de Portugal y, a falta de borrascas que le bloqueen el paso, extenderá su influencia por todo el norte peninsular. Mandarán los cielos despejados, subirán las temperaturas y el viento soplará del norte, en virtud de la circulación horaria (en el sentido de las agujas del reloj) característica de las altas presiones. La pega es que este viento de componente norte dejará nubes de estancamiento en la costa cantábrica de Lugo y A Coruña. El aire llegará cargado de humedad del mar, tocará tierra, se elevará y, al hacerlo, el vapor de agua que contiene se condensará, formando nubes y brumas, y frenando el ascenso de las temperaturas por encima de los 21°. Libres de este fenómeno, el litoral atlántico y las comarcas del interior disfrutarán de un fin de semana sin nubes y con temperaturas que oscilarán entre los 28° de Vigo o Monforte, y las 32° previstas para Ourense.