El PSOE aspira a reeditar el pacto global con un BNG más reticente que en el 99

Anxo Lugilde REDACCIÓN

GALICIA

La reciente mejora de las relaciones entre ambas fuerzas permitirá un rápido inicio de la negociación Los nacionalistas quieren evitar gobiernos del PP, pero «sen que nos tomen o pelo».

15 may 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

Luisa Fernanda Rudí, la presidenta del Congreso de los Diputados, irrumpió ayer en la campaña gallega para arremeter contra los pactos entre PSOE y BNG. Pidió que los ciudadanos gallegos analicen la gestión de ambos partidos en Vigo para comprobar si esa coalición «mejora su calidad de vida». La invectiva de la presidenta de la Cámara Baja refleja la obsesión de los populares con la entente de nacionalistas y socialistas que, previsiblemente, los va a apartar de nuevo del poder en las principales urbes gallegas y podría extenderse a las diputaciones. Louro y Quintana El engranaje para negociar está listo. Puede comenzar a funcionar a partir del lunes 27 de mayo, dos días después de los comicios. El secretario de Organización del PSOE gallego, Antón Louro, y el coordinador de la ejecutiva del BNG, Anxo Quintana, desbrozarán previsiblemente el camino para que Beiras y Touriño sellen el acuerdo final, que puede ser un pacto global o unas directrices generales. Desde el Prestige , las relaciones entre las dos fuerzas mejoraron notablemente. Hay un canal de comunicación cotidiano entre Quintana y Louro. La campaña ha supuesto un distanciamiento, sobre todo por el pulso directo de Vigo, pero nadie duda de que habrá pactos. «Aspiramos a ter maiorías suficientes para gobernar. Logo seguiremos os criterios xa coñecidos de formar alternativas ó PP, que deben ser estables e leales», dice Quintana. La de la lealtad es la condición que va a remarcar el BNG, por mandato de su última Asamblea Nacional, en la que se varió la estrategia. El Bloque ya no habla de pactos con el PSOE antes del 25-M. «Estamos dispostos a vender máis cara a pel e sobre todo que non nos tomen o pelo como no 99, cando lles dimos todo o apoio ó PSOE en Lugo e Santiago, e nos fixeron todo tipo de xogadas en Pontevedra, Ferrol e Vigo, e logo rexeitaron un acordo para as autonómicas do 2001», dice un candidato nacionalista. «Hai que buscar fórmulas estables. No PSOE temos vontade de entendimento e pensamos que vai ser posible», apunta un dirigente socialista.