Galicia pone en marcha el programa Ignicia, cuyo objetivo es trasladar al mercado las aplicaciones comerciales generadas de los centros de investigación
21 sep 2021 . Actualizado a las 11:40 h.La ciencia gallega tiene mucho que aportar a la sociedad. Pero lograr que los avances desarrollados en los centros de investigación lleguen a hacerse efectivos en el día a día de la población no siempre es tarea sencilla. La administración gallega lleva años peleando para lograr acabar precisamente con estas barreras y acompañar a los centros de conocimiento gallegos en este camino. Y precisamente con este objetivo, la Xunta de Galicia, a través de la Axencia Galega de Innovación (Gain), y con la colaboración de la Fundación Barrié, ha puesto en marcha una nueva edición del programa Ignicia Proba Concepto, una iniciativa pionera en España que promueve el desarrollo de aplicaciones comerciales de las investigaciones generadas en los centros de conocimiento gallegos, facilitando así la validación de la tecnología y la elaboración de planes de negocio. Tal y como desvelaron hace unas semanas, en esta tercera edición han sido un total de siete las propuestas ganadoras y que, por tanto, contarán con la ayuda de la administración.
«O obxectivo principal é promover a transferencia dos resultados da investigación que se xera nos centros de coñecemento galegos e levar eses resultados ao mercado para facer rendible a investigación en Galicia», explicó la directora de Gain, Patricia Argerey. Tal y como apuntan desde la Xunta, de los proyectos seleccionados, dos están promovidos por la Universidad de Vigo, otros dos por la Universidad de Santiago de Compostela, uno por la Asociación de Investigación Metalúrxica del Noroeste (Aimen), otro por el Centro Tecnolóxico de Telecomunicacións de Galicia (Gradiant) y el séptimo por la Fundación Profesor Novoa Santos da Coruña. De las propuestas escogidas -en total se presentaron 28 proyectos- cuatro pretenden llegar al mercado a través de la creación de una spin-off, mientras que los otros tres proponen el licenciamiento a la industria.
Y si se echa un vistazo a las cifras, el presupuesto total solicitado asciende a los 2,8 millones de euros, lo que supone un importe medio de cerca de 400.000 euros. Explican desde la Administración autonómica que los proyectos tendrán una duración de dos años y contarán con la participación de una treintena de investigadores.
Las iniciativas ya han arrancado su camino. El pistoletazo de salida se dio ya este mes de septiembre. A partir de ahora, los responsables de los proyectos tendrán dos meses para perfilar sus planes de comercialización. No estarán solos en esta empresa. Porque contarán con el asesoramiento especializado del equipo del programa Ignicia. A partir de ahí, los grupos de investigación recibirán una aportación económica para financiar los costes que supone trasladar los planes al mercado: «Este instrumento de apoio económico permítelle compartir á Xunta de Galicia os riscos e beneficios de cada proposta, garantindo que as iniciativas exitosas xeren retornos para seguir investindo na transferencia de coñecemento dos organismos galegos en próximas convocatorias», explican.
Celia: Un proyecto para facilitar el acceso a Internet a usuarios no digitales
Celia es el nombre con el que ha sido bautizado uno de los proyectos seleccionados este año en el programa Ignicia. Esta iniciativa pretende valorizar un motor conversacional o chatbot con capacidades empáticas consistente en diversas librerías software orientado al entretenimiento y monitorización terapéutica para personas con capacidades limitadas. «El proyecto pondrá en valor los activos del Grupo de Tecnologías de la Información en inteligencia artificial para facilitar el acceso a Internet a usuarios no digitales. La inteligencia conversacional incluye los sistemas de inteligencia artificial orientados al lenguaje, como los chatbots inteligentes, el análisis de sentimiento, de emoción, de salud mental…», explica Javier González Castaño, uno de los responsables del proyecto.
Su iniciativa puede ayudar mucho a los más mayores, proporcionándoles acceso a información de Internet de su interés utilizando exclusivamente la voz, por ejemplo. Pero hay mucho más. Porque Celia puede ayudar a cualquier tipo de usuario con barreras digitales, incluyendo personas con diversidad, con dificultad idiomática, personas digitales en fases leves de deterioro cognitivo o incluso a niños pequeños: «También a los familiares y cuidadores de las personas de algunos colectivos, ya que el sistema puede detectar el deterioro cognitivo de forma automática», sentencia González.
Este investigador asegura que la convocatoria de Ignicia supone «ante todo, un reconocimiento a muchos años de trabajo investigador intentando dar retorno a la sociedad». «Las iniciativas de financiación pública universitaria tienen que tener en cuenta tanto la transferencia como la investigación fundamental», resume.
TraffikGene: Nuevos fármacos para desarrollar terapias mejoradas para el cáncer
TraffikGene está enfocado a desarrollar y sintetizar nuevas moléculas que protejan y entreguen ácidos nucleidos, como el RNA mensajero (mRNA), en el lugar y sitio apropiados y de forma eficiente y no tóxica: «Nosotros trabajamos con unas moléculas llamadas péptidos, que son como pequeñas proteínas, que actúan como vehículos de transporte, ayudando a llevar al interior de las células el material genético, como DNA o RNA, para que puedan desempeñar su función», explica Javier Montenegro, investigador y uno de los responsables del proyecto. Añade este experto que, su tecnología puede tener aplicaciones en diversos ámbito de la biotecnología como por ejemplo el tratamiento de enfermedades y el desarrollo de nuevas vacunas.
«Quizás el ejemplo más claro de cómo puede mejorar el proyecto la vida de la gente se da en el ámbito terapéutico, donde nuestra iniciativa aporta nuevas herramientas que facilitarán la llegada de una nueva generación de fármacos innovadores, basadas en ácidos nucleicos terapéuticos como el ARN mensajero», resume Montenegro. Su objetivo es ahora intentar llegar lo más lejos posible para transferir esta tecnología y que muy pronto pueda ayudar a la gente: «Por ejemplo en el desarrollo de terapias mejoradas para enfermedades que presenten un difícil tratamiento como puede ser el cáncer».
Montenegro reconoce que el Ignicia supone un reconocimiento externo muy importante: «Respalda nuestras convicciones sobre el inmenso potencial que puede desarrollar nuestra tecnología y es una financiación imprescindible para nosotros», asegura.
Canther: Una solución terapéutica para tratar de bloquear la metástasis
Con más de 20 años de experiencia a sus espaldas, Angélica Figueroa y su equipo centran ahora sus esfuerzos en el estudio del proceso de metástasis: «Son responsables de alrededor del 90 % de las muertes de los pacientes con cáncer, pero a día de hoy no existen terapias específicamente dirigidas a la metástasis», resume la científica. Pero las cosas pueden cambiar. Porque su grupo ha identificado una proteína implicada en estadios tempranos de la progresión tumoral y metástasis de cáncer de colon, que se ha propuesto como una prometedora diana terapéutica: «En el 2013 fue cuando científicamente surgió la oportunidad de poder empezar a diseñar nuevos fármacos contra esta diana con el fin de bloquear la metástasis, algo que comenzamos gracias al apoyo del Instituto de Salud Carlos III», relata.
El aspecto diferencial de su diana terapéutica es que está implicada en el proceso de degradación de proteínas: «El diseño de fármacos dirigidos contra este proceso de degradación de proteínas es un área candente que ha despertado un gran interés entre inversores y compañías farmacéuticas. Nuestro grupo ha demostrado en modelos in vitro y modelos animales que el bloqueo de esta ruta previene la formación de metástasis y es potencialmente capaz de eliminar las ya existentes», asegura. Además, relata, en base al mecanismo de acción de su diana terapéutica, esta terapia se podría desarrollar no solo para cáncer de colon, sino también para otros tipos de tumores.
Tal y como explica Angélica Figueroa, el apoyo de Ignicia, como el que están recibiendo de la Fundación La Caixa, son básicos para ellos: «Nos permitirá avanzar en la optimización del fármaco».