La empresa que ayuda al dueño forestal a vigilar sus montes

LA GALICIA ECONÓMICA

Parte del equipo de Asefor, trabajando sobre el terreno de una propiedad.
Parte del equipo de Asefor, trabajando sobre el terreno de una propiedad.

Asefor ofrece servicios técnicos de ingeniería forestal a todos los integrantes del sector maderero con la sostenibilidad por bandera

13 oct 2021 . Actualizado a las 16:11 h.

«Invertir en los servicios del ecosistema en montes de Galicia es invertir en servicios esenciales para la vida». Es una de las máximas de Asefor, consultoría que ofrece servicios técnicos de ingeniería a todos los integrantes del sector forestal, desde propietarios hasta industria. Dentro de estas tareas se encuentra el apoyo a los propietarios de montes en su gestión, en la trazabilidad de los productos o en la puesta a punto de los diferentes trámites que hay que realizar para cumplir aspectos legales; o como resume Manuel Beiro, uno de sus socios, «impulsamos dixitalmente o sector forestal cara un desenrolo sostible dos recursos do medio rural».

Para hacerlo, una de sus herramientas más populares se llama Bikenta y permite a los dueños de montes mantener vigiladas y actualizadas sus propiedades. «O nome provén de xuntar a palabra bioeconomía con coidadores de árbores e pretende ser unha plataforma para impulsar o desenrolo do sector forestal galego», explican. En su creación y desarrollo está el departamento de I+D e innovación de Asefor, y comparte nombre con la plataforma web de acceso gratuito que se le ofrece a los más de 10.000 usuarios del grupo Alvariza: cada propietario dispone de información de sus terrenos, las afectaciones por ley de incendios, ambientales, patrimonios, especies amenazadas...

Asefor nació en el año 2010 de la mano de tres trabajadores de la empresa pública Seaga (Raquel González y Marcos Rivas, junto con Beiro) y su primer encargo tuvo que ver con una certificación del sello Alvariza FSC, que promueve una gestión forestal ambientalmente apropiada, socialmente beneficiosa y económicamente viable. Desde entonces, una parte importante de su trabajo consiste en guiar a empresas que precisen de estas certificaciones. Todos los servicios están conectados a través de herramientas digitales con accesos personalizados, porque hay un abanico muy amplio de empresas en este sector: desde maderistas o serradores hasta fábricas de muebles que necesitan acompañar sus productos con los sellos de gestión forestal sostenible.

Los promotores de Asefor reconocen que los inicios no fueron fáciles desde el punto de vista económico, pero la persistencia, la colaboración y la formación fueron claves para ir logrando los objetivos. Once años después, la empresa cuenta con un equipo multidisciplinar de trece profesionales y tiene una facturación anual por encima de los 500.000 euros. Gracias al origen de sus socios -Ferrol, Lugo y Santiago-, han podido abarcar todo el territorio gallego; pero tienen bosques certificados en otras provincias españolas y también realizan tareas en Portugal donde «o catastro aínda non está presente en todo o territorio», subraya Beiro.

Asefor se enmarca en un sector en el que se están produciendo muchos cambios que obligan a las empresas a adaptarse por el cambio climático o el desarrollo sostenible, «e o efecto do covid acelerou estas cuestións que preocupan aos países», añaden. Por eso, su papel es clave en este proceso de digitalización que, remarcan, se debe realizar con la simbiosis entre empresas TIC y de ingeniería forestal. Así, hay que hablar también del asesoramiento que reciben desde el DATALife Hub de Innovación Dixital: «A situación do sector forestal precisa de un impulso dixital e apoio a produtores e empresas. Con este obxectivo é co que tratamos de avanzar no desenrolo de proxectos que son apoiados polo HUB».