Gaspar Barreras: «Brandia fabrica papel para cubrir 23 veces la superficie de Galicia»

Tiene un tono de voz fuerte y con un sesgo imperativo. Le gusta escuchar, dice. Es directo y perfeccionista. Da la sensación de que la improvisación no va con él. A medida que se le conoce deja entrever a una persona próxima y amable. Gaspar Barreras Rodríguez (Vigo, 11 de febrero de 1954) lleva un apellido que revela la relación de su familia con los astilleros.

-¿Y su trayectoria?

-Estudié Económicas en Santiago e hice un máster en Madrid. Comencé a trabajar en una empresa pública: Viviendas Sociales de Madrid, dedicada a la rehabilitación. Después de ocho años, me contrataron en Vigo en Larsa, donde estuve de director general durante toda la crisis. Tras la venta, quise mantener la actividad profesional en Galicia y me contrataron en Conservas Cuca, propiedad de la familia Pita. Estuve con ellos 14 años como director general. En ese momento, que coincidió con la jubilación del director general de esta papelera, cinco hermanos de la familia Pita debieron de pensar: «Más vale malo conocido, que bueno por conocer». Y entré en esta compañía. Fabricamos el papel suficiente como para cubrir más de 23 veces la superficie de Galicia.

-Fue a caer en una de las compañías más longevas de Galicia.

-Así es. Fue fundada por Peregrino Riva en 1810 en San Xoán de Lousame, y el capital sigue siendo 100 % de la familia Pita Riva.

-Dicen que el papel se muere

-No sé quién puede decir semejante cosa, pero está muy, muy equivocado. Un producto natural, renovable, reciclable, y biodegradable que está siendo el sustituto del plástico en muchos de sus usos, comprenderá usted que tiene un presente y un futuro muy esperanzador. El papel cumple con unos estándares medioambientales de máxima exigencia. Puede ayudar a conseguir un mundo más sostenible y mejor en los próximos años. El producto está ahí, ahora depende de que las personas seamos conscientes de sus ventajas y le demos el uso y el protagonismo que se merece.

-Tienen más de 200 fórmulas para la elaboración del papel.

-Sí, es cierto. Nuestra estrategia es ofrecer a cada cliente un tipo de papel que se adapte a sus necesidades. No pueden ser las mismas características técnicas para un papel que necesite más o menos fibra, larga o corta, resistencia... Conocemos esta problemática y sabemos dar respuestas personalizadas. Tenemos que saber diferenciarnos de los grandes competidores mundiales.

-Ahí voy, hay verdaderos gigantes del sector. ¿Les comerán? ¿Se pueden quedar como están?

-El futuro está por escribir y no debemos ponernos ni barreras ni objetivos que no dependen de nuestras propias decisiones. Nuestra competencia son auténticos monstruos multinacionales, alguno de ellos con una facturación superior a 6.000 millones de dólares, que saben hacer muy bien su trabajo y no son predecibles, así pues, lo mejor es centrarnos en nuestra tarea y pensar que el futuro será como el presente. Papelera de Brandia está trabajando en estos momentos en un proyecto de crecimiento de 5.000 toneladas más de producción, que la ayude a ser más competitiva, de forma autónoma. La inversión en dos años será de unos 8 millones de euros.

-¿A dónde exportan?

-A 45 países de los 5 continentes viaja el 66 % de la producción.

-¿Qué significa para ustedes el medio ambiente?

-Para Papelera de Brandia son una prioridad el entorno, el medio ambiente, unas relaciones empresa-trabajador fluidas y de confianza, aportar nuestro grano de arena a un mundo mejor y tener siempre presentes los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Lo que hemos visto en plena pandemia con la compra de material covid es inadmisible y no es el modelo de economía que practicamos y defendemos. Las empresas, además de ganar dinero y crear riqueza que garanticen su continuidad, tienen que estar dispuestas a servir a la sociedad. La ética debe presidir sus actos.

-¿Han tenido alguna vez un problema de este tipo?

-Llevo dirigiendo esta empresa 10 años, y le puedo asegurar que en todo este tiempo, no hemos tenido ningún problema ambiental. En los últimos años hemos dedicado muchas inversiones para mejorar y asegurar que así sea nuestro día a día actual y futuro. Acabamos de sacar al mercado junto a Copade y Ence, el primer papel del mundo con certificación de madera justa, que cumple con los criterios ambientales, sociales y económicos del comercio justo. Creo que esto define cuál es nuestra política al respecto.

-El 2020 fue un año duro. Pero a ustedes les dio alegrías...

-Antes de nada: no tenemos que lamentar ninguna desgracia personal debido al covid. También podemos celebrar que hemos trabajado los 327 días previstos, lo que ha sido un reto muy importante. Hemos instalado una turbina de alta eficiencia de 4,4 MWh, que ha mejorado ostensiblemente la eficiencia de los motores marinos anteriores. Hemos realizado unas inversiones de 2,4 millones de euros para asegurar aún más nuestra calidad, aumentar la producción, cumplir con las nuevas normativas medioambientales, y aumentar la seguridad y salud en el trabajo, entre otras cosas. Hemos conseguido certificaciones importantes y hemos implantado nuestro primer plan de igualdad, anticipándonos 2 años a su obligación legal. Hemos trabajado para conseguir ser neutros en el año 2020 en emisión de gases efecto invernadero, lo cual es un hito muy importante. Hemos instalado nuestros primeros 100 kWh de placas solares para autoconsumo eléctrico.

-¡Uff! Vaya retahíla de logros.... ¿Usted no piensa en jubilarse?

-Tengo 67 años y ningunas ganas de jubilarme. Me siento muy identificado con esta empresa, con los empleados. Me siento muy bien, cómodo, con ganas e ilusión de seguir trabajando. Estoy en una fase de mi vida que, le aseguro, está llena de experiencia y creatividad.

Fabrican papel packging tanto para la alimentación como para la industria farmacéutica, agricultura, regalo, etcétera. Producen 700 millones de metros cuadrados anuales.

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