José Manuel Cánovas: «Las empresas gallegas tienen un plus: sentido común»

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

LA GALICIA ECONÓMICA

Tras más de 40 años de actividad, este auditor gallego acaba de ser elegido profesional del año por sus colegas

21 dic 2018 . Actualizado a las 19:52 h.

Hijo de la emigración, nació hace 64 años en Guinea Ecuatorial, se crio luego en Canarias, estudió Económicas en Santiago, fundó su primer despacho profesional en Málaga y luego repitió en Galicia. A José Manuel Cánovas todo este trote le ha dado una visión muy amplia sobre el mundo empresarial y los cambios que se han ido produciendo en diferentes sectores. Todo ello lo ha trasladado a su actividad profesional como auditor y como asesor de compañías. Esta semana sus colegas del Registro de Economistas Auditores le han distinguido como profesional del año en su actividad. «Le doy una importancia tremenda, porque no es solo el reconocimiento a mi trabajo, sino a todos los profesionales que están conmigo», explica. Sus dos empresas, Audicon en Galicia, y GAP en Málaga, emplean a unas 70 personas.

-No son una de las grandes, pero ya tienen una cartera de clientes relevante.

-Estamos auditando a unas 70 empresas, principalmente en Galicia, pero también algunas fuera, como en Canarias, Madrid, Alicante... Nuestro trabajo no es solo auditarlas, es acompañarlas a, por ejemplo, salir fuera de España. Trabajamos mucho con empresas del sector de servicios y de retail [comercio al por menor] y de un tamaño relativamente pequeño, porque nos sirven muy bien de termómetro para ver cómo la economía, qué cosas funcionan... Y, a la vez, no genera una gran dependencia en la empresa: ninguno de nuestros clientes pesa más del 5 % en el balance de la empresa. Eso te da independencia para trabajar y libertad al equipo. Es algo han valorado nuestros colegas.

-Y las empresas, aparte de escucharle, ¿le hacen caso cuando le piden asesoramiento?

-Casi siempre, sí. Hace años, por ejemplo, que venimos avisando al retail que el mundo estaba cambiando, que el mercado on-line iba a dar un golpe más fuerte de lo que se pensaba, y hubo quien supo anticiparse y se ha diversificado. Dicho esto, ¡ojalá hubiera sido capaz de advertir lo que pasó en el 2007! Pensé que era solo una ola, cuando venía un tsunami.

-¿Y cómo se han diversificado los que le han escuchado?

-Principalmente a través de dos vías. Por un lado, dando a la gente experiencias nuevas de compra y buscando mercados nuevos. Y, por otra, utilizando toda la información que hay en el mercado, se pueden hacer seguimientos al detalle que permiten tomar decisiones más ágiles. Y siendo consciente de que se trabaja en toda una cadena.

-Ustedes operan con pequeñas empresas. ¿Es un problema, o una ventaja, que Galicia sea un territorio de micropymes?

-No sé decir si es un problema. Es una cuestión casi cultural. Lo que es una ventaja es la forma de trabajar. En el despacho de Andalucía llegamos a hacer 180 concursos de acreedores al año; en Galicia ha sido algo anecdótico. Aquí el carácter del empresario es diferente. Se hablaba del plus de resistencia de la economía gallega. Realmente lo que hay es un plus en las empresas gallegas: la prudencia, el sentido común. Puede ser que venga de la emigración, que hace que uno viva de otra manera. Yo soy hijo de la emigración y lo he visto así.