Doro, capitán del Xallas: «Seguín este ano porque me considero un home de club»

NICO VÁZQUEZ SANTIAGO / LA VOZ

FUTBOL GALLEGO

Sandra Alonso

El veterano centrocampista cumplirá 44 años en noviembre

15 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Sergio Prego Cancela (Santa Comba, 1977) seguirá luciendo el brazalete de capitán del Xallas. El centrocampista Doro, uno de los grandes veteranos de la Preferente Galicia a sus 43 años, estuvo a punto de retirarse al término de la temporada pasada. Ahora, con ánimos renovados, prepara un nuevo curso en un plantel con muchos cambios, que tratará de abandonar la parte baja de la clasificación en la que se han estancado últimamente.

«Este verán buscamos outro tipo de fichaxes, máis contrastadas. Os últimos anos saímos con futbolistas moi novos. Teremos que ver como resulta, pero contar con veteranos con experiencia pode darnos un salto de calidade», explica el jugador de Santa Comba. Doro se muestra satisfecho con el nuevo rumbo que ha tomado el club, ya que el transcurso de las campañas le ha pasado factura, no tanto física como mentalmente: «Son moitos anos loitando polo mesmo. Perdes máis partidos dos que gañas, e iso acaba afectándote».

En ese contexto, Doro tenía pensado colgar las botas tras su séptima temporada en el Xallas. Fueron el club y su técnico, David González, quienes lo acabaron convenciendo para quedarse: «Pedíronme que seguira un ano máis. Eu considérome un home de club, polo que aceptei. Atópome ben a nivel físico e mental e teño gañas de gozar deste equipo», explica. Su adiós ya estuvo cerca en 2015, cuando sufrió una grave lesión de tobillo de la que terminó recuperándose adecuadamente. «Obviamente, noto que estou sen ligamento nun nocello. Calquera golpe me fai sentir algo», indica. Las molestias no le han impedido, por fortuna, seguir jugando al fútbol seis años después.

El curso pasado no era el mejor para retirarse. Fue una temporada «atípica», que comenzó muy bien en lo deportivo, con «seis ou sete puntos de nove posibles», un ritmo que el equipo, mermado por las lesiones, no consiguió mantener en los siguientes encuentros. De todas formas, sabían que jugaban «sen presión»: «Saímos cun equipo xustiño e as lesións non nos permitiron gozar. Foi case unha temporada de proba», explica.

El veterano centrocampista comenzó su andadura en las categorías inferiores de la SD Castriz a los catorce años. Ya desde cadete fue convocado con el sénior, jugando en ambos equipos a la vez. «Eu os meus primeiros anos pouco puiden gozar, porque ao final levo toda a vida compaxinando cos maiores», comenta.

De Santa Comba se desplazó a la costa, al Malpica, por entonces recién ascendido a la Tercera División. Llegó a entablar conversaciones con equipos de la Segunda B, como la Ponferradina o el Marino de Luanco, con los que finalmente «non houbo acordo».