Tony Lomba: «De mí la gente espera salvajismo y yo se lo doy»

FUGAS

Ramón Yoshimura

Ni la cordura de Elio dos Santos apacigua el gamberrismo provocador del «crooner» vigués. Los dos vuelven «a casa» por Navidad

23 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Mucho antes de que Vigo se llenase de luminarias, tenía la ciudad una tradición que anticipaba la inminencia de las celebraciones navideñas: el lanzamiento de la única canción que cada año graban Tony Lomba & Elio dos Santos y el anuncio de sus dos conciertos en La Fábrica de Chocolate. Así viene siendo desde hace más de 25 años. Desde que los dos músicos vigueses decidieron emprender sus propios proyectos en solitario tras la disolución de aquel delirante triunvirato musical, absolutamente adelantado a su tiempo, que bautizaron como Los Tres Sudamaricones.

 A estos dos únicos conciertos anuales en Vigo, Lomba y Dos Santos suman de un tiempo a este parte otro previo en Santiago. «Siempre decimos que a Santiago vamos a ensayar para luego ir a Vigo a tocar», bromea un Tony Lomba desprendido desde hace un año del alcohol y del tabaco pero nunca de su afán provocador.

­—Ese concierto en Compostela tuvo lugar la semana pasada. ¿Cómo fue?

—Brutal. Mira que allí tenemos a los críticos de la profesión y que había mucha expectación. ¡Tony Lomba sobrio! A ver qué pasa con este tío. Y todo el mundo flipó. Saqué toda mi chulería y mi macarrismo, sin caerme a los lados. He recuperado mucho la voz y me vi muy entero. ¿Qué ocurre? Que tú te lo pasas mejor si subes pedo, pero es que sobrio cantas que te mueres. Eso sí, ahora cuando me subo a las barras, ya no salto al suelo (se ríe). Agacho el culo y bajo el pie.

—¿Por qué solo hacéis estos conciertos al año?

—Pues porque hay la magia esa. O nos escuchas ahora o no nos vas a poder escuchar más.

—En el 2018 me decías que os teníais miedo el uno al otro. ¿No será por eso?

—Más que miedo, nos tenemos respeto. Somos dos personas a las que nos molan muchas cosas en común, pero nuestra manera de funcionar es Ártico y Antártico. El miedo es a que si falla uno o falla el otro, esto se cae. No es como en un grupo. Aquí no tienes un bajo o una batería que te cubra. Como metas la gamba se da cuenta todo dios.

—Hace unos días, en tus redes, te definiste como «una mantis religiosa albina». ¿Es por aquello de devorar a tu amante?

—No, no. Es porque es como me veo físicamente. Bueno, ahora me veo como una mantis religiosa albina con un preñe de seis meses. He dejado de beber y de fumar pero he caído en otro infierno. Desayuno seis donuts. Y los Huesitos me los como a paquetes de diez.

—¿Cómo se lleva un proyecto como este, en buena medida basado en la provocación, en un momento como el actual, en el que el personal tiene la piel tan fina?

—Los de la piel fina, que se jodan. Es que precisamente por eso que existen Tony Lomba & Elio dos Santos. Basta ya de estar con las uñas preparadas para clavárselas en el cuello a la gente. Pero vamos a ver, ¿vamos a perder en Galicia una de nuestras señas de identidad, que es ese marisco verbal que tenemos, la ironía? ¡Nunca! Eso hay que conservarlo, le pese a quien le pese.

—¿Corren buenos tiempos para los «crooners», cómo lo ves?

—Pues no lo sé, ni me importa. Yo nunca he sido, ni tengo pensado ser, un crooner al uso. De mí lo que se espera es salvajismo. Y yo se lo doy. Creo que lo que no van a correr son buenos tiempos para los músicos, en general. Buenos tiempos, a partir de ahora, se le va a llamar a medio aforo.

—La teoría dice que con los años, uno se vuelve más conservador. ¿Es así?

—Qué va tío, yo cada vez soy más punki. Ya no me callo nada. Soy muy sincero y, quizá por eso, muy cruel.

—¿Has tenido alguna vez la sensación de que Tony Lomba, el personaje, se apoderaba de Germán Fandiño?

—Eso me ocurría cuando salía por la noche. Y no lo soporto. Te vienen los chavales jóvenes esos, todos cachas a hacerse la foto contigo y lo primero que te sueltan es «joder tío, que serio estás». Pero vamos a ver, no voy a ser tu juguete ni tu payaso. De buen rollo, nos hacemos la foto —yo soy el feo y tú el cachas—, pero hasta ahí. Sé que como artista tendría que asumirlo..., pero no soy capaz. Es que aparte se generan conversaciones en las que me siento muy inútil. Porque estás en una conversación en la que están hablando guay de ti. ¿Qué vas a decir tú?

—¿Cómo está aquel proyecto de grabar un disco de Tony Lomba & Elio dos Santos?

—Está ahí. El planteamiento era haberlo sacado este año pero con toda esta mierda que nos comimos, se nos quedó atascado. Pero algo hay que hacer porque es que canciones como España, España u Hoy es un día especial no estén grabadas, tiene mucho delito. Eladio me machaca cada poco con ese tema. Soy yo el que se echa para atrás. Yo es que quería grabarlo con la Sinfónica de Praga o algo así.

—¿Qué se va a encontrar la gente que vaya a vuestros conciertos?

—Se van a encontrar a un Tony Lomba muy, muy en su sitio. Pero igual de gamberro y de provocador que siempre.

??? Vigo La fábrica de chocolate

JUEVES 29 Y VIERNES 30 13,20 EUROs