«Thriller» nórdico con acento gallego

FUGAS

El escritor José Vicente Domínguez deja aparcada la novela costumbrista e histórica para adentrarse en el suspense con una trilogía ambientada en A Coruña cuyas dos primeras entregas son «Por mucho que me quieran» y «Siete días de Marta»

29 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando hace ocho años nació su nieto Pablo, José Vicente Domínguez (Palmeira, 1946) regresó a A Coruña para arropar a su hija Kina en sus primeros meses de madre primeriza. Volvía así a una ciudad en la que había disfrutado durante varias etapas de su vida, entre ellas, su juventud.

Regresar le permitió reencontrarse con viejos lugares tanto de la capital herculina como de sus alrededores, principalmente del concello de Oleiros. Y de esos paseos diarios —Santa Cristina, Mera o la propia ciudad de A Coruña— que dio durante los primeros meses de vida del pequeño Pablo surgió en su cabeza Marta, «una joven incapaz de aceptar el desconocimiento de sus orígenes y que se entrega por entero a una lucha desigual», explica el autor.

Una mujer que busca su identidad por escenarios que el lector identificará perfectamente y lo convertirán casi en secundario de las novelas, porque son lugares por los que cualquier gallego, en especial si es coruñés, ha transitado innumerables veces.

Marta es la protagonista de una trilogía cuyos dos primeros thrillers ya se han publicado. Por mucho que me quieran (3.ª edición) y Siete días de Marta son dos tramas que mantienen al lector enganchado durante sus más de trescientas páginas. La fuerza y el misterio de la novela nórdica, pero con las localizaciones, personajes, circunstancias y ritmo de la prosa española. Y sabor gallego.

Una trilogía que en los próximos meses tendrá en El chubasquero amarillo el esperado final que demandan los lectores. Un cambio radical en la trayectoria de José Vicente Domínguez, que en su séptima década de vida decidió aceptar el reto de su hija y aparcar la novela costumbrista e histórica para adentrarse en la policíaca y de misterio. El resultado, este hat-trick de una Marta Domínguez cuyo gran secreto es que podría ser cualquiera de nosotros.