Dolores Redondo: «Si pudiéramos medir el nivel de paranoia, yo lo tendría muy alto»

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Es la reina en las librerías este otoño. La trilogía ambientada en el Baztán la convirtió en un fenómeno literario al que siguió un Premio Planeta 2016. Conocedora de que son pocas las que viven de los libros, esta hija y nieta de gallegos no olvida sus orígenes al frente de una cocina

22 oct 2019 . Actualizado a las 17:24 h.

Las librerías se le quedan pequeñas a Dolores Redondo Meira (San Sebastián, 1969) estos días en las presentaciones de La cara norte del corazón (Ediciones Destino), la precuela de la Trilogía del Baztán, cuya adaptación cinematográfica de su segunda entrega, Legado en los huesos, llega en diciembre a los cines. En abril del 2020 es el turno de Ofrenda a la tormenta, con la que se cierra el ciclo iniciado con El guardián invisible. La autora vasca, hija y nieta de gallegos de Pontevedra y Corme, vuelve a hacer pleno con una historia oscura donde nos conduce de Nueva Orleans al valle del Baztán y para la que se inspira en el caso de un asesino real.

Desde que salió a la venta en octubre, la ficción está en el podio de los ránkings. Redondo llena auditorios, como acaba de hacer en Málaga, en la promoción que la trae a Galicia. El lunes 21 estará en Santiago; el martes 22, en Ourense, y el miércoles 23, en A Coruña. Después del descanso concedido a la inspectora Amaia Salazar con Todo esto te daré, una trama ambientada en la Ribeira Sacra con la que ganó el Planeta 2016 y es el título galardonado más vendido de los últimos diez años, la escritora retorna a sus fructíferos bosques de Navarra, donde vive. Nos atiende al teléfono desde la habitación de un hotel en Madrid. Su casa es ambulante mientras dure la gira.

-¿Por qué atrae tanto lo negro?

-Hay países donde, por sus circunstancias, en el caso de España, por la dictadura, contar que había crímenes por todas partes o que se producían todo tipo de perversiones no era lo que tocaba. Creo que ese ha sido uno de los factores que provocaron que el éxito llegara tarde. Era el hermano pequeño de la Literatura.

-¿Se identifica con el género?

-Aunque los libreros tienen que catalogar las novelas por géneros en sus estanterías, no considero que lo que escribo sea novela negra, esa novela criminal en la que el objetivo es, simplemente, capturar a un asesino. Se me queda estrecha en sus márgenes, los salto constantemente.

­-¿Se desvincula de la etiqueta?

-No creo que lo mío sea novela negra. Excepto el hecho de que hay un asesino al que se intenta dar caza, por lo demás, mis novelas tienen partes históricas, partes de denuncia social, una exploración profunda del concepto de la familia, de la paternidad y la maternidad y del lugar que cada uno ocupa en el mundo.

-¿Es más de Donna Leon o de Henning Mankell?

-Mankell. He leído un montón de nórdica. El éxito de sus autores democratizó la novela negra. La que llegó desde el norte de Europa trajo otros matices, mezcló conceptos políticos, otro tipo de corrupciones, como la saga Millennium, y mostró que regiones recónditas y menos habitadas pueden ser el escenario de la acción de una novela. Nos sacaron de Nueva York, Chicago o Los Ángeles y nos presentaron otras realidades.

No considero que lo que escribo sea novela negra. Se me queda estrecha en sus márgenes

dolores.La última novela de Dolores Redondo, «La cara norte del corazón», es una precuela de su «Trilogía del Baztán»
La última novela de Dolores Redondo, «La cara norte del corazón», es una precuela de su «Trilogía del Baztán» No disponible

-¿Qué está leyendo ahora?

-Tus pasos en la escalera, de Antonio Muñoz Molina. En mi tiempo libre no soy muy de novela negra, aunque tengo entre mis referentes a Henry Miller y Norman Mailer. No profundizaron tanto en el aspecto criminal, pero sí en la perversión.

-Tiene fama de tomarse muy en serio el proceso documental antes de escribir.

-Sí, leo mucho, pero no solo para tener documentación. Quiero saber cómo es el lugar sobre el que escribo.

-En «La cara norte del corazón» se inspira en un asesino real.

-Sí, en un hombre que mató a toda su familia en Estados Unidos y estuvo escondido, que no huido, durante 18 años. Rehízo su vida, sin taparse mucho, aunque cambió de nombre, y lo cogieron gracias a un programa de televisión muy popular, Los asesinos más buscados. Una vecina lo reconoció cuando vio la recreación forense de cómo sería su rostro envejecido.

-Un hombre normal...

-Sí. Así es como se titula uno de los capítulos de la novela. Esa es la respuesta que escuchamos muchas veces en un informativo cuando preguntan a los vecinos de un asesino: «Era un hombre normal».

La sensación más extendida cuando no tienes a nadie en este mundo, el editorial, es la invisibilidad

dolores.Elizondo y los bosques del valle del Baztán vuelven a ser el escenario de la acción que arranca en Nueva Orleans
Elizondo y los bosques del valle del Baztán vuelven a ser el escenario de la acción que arranca en Nueva Orleans

 Fenómeno editorial

La trama arranca en Nueva Orleans, a miles de kilómetros de Elizondo. Después de la Trilogía del Baztán, Redondo nos traslada a donde comenzó todo.

-¿Tenía la precuela programada?

-No, aunque fui dejando miguitas a los lectores para conducirlos a este libro, que se puede leer de forma independiente a la trilogía y que concibo por un portal de entrada al universo Baztán.

-¿Fue duro inspirarse en un asesino real?

-Parto de él, de su personalidad y de los hechos. Luego, invento cómo ha sido su vida durante esos 18 años escondido. Documentarme no fue duro, pero sí novelar sus crímenes. Meterme en su piel, intentar pensar qué sentiría, qué le llevaría en los días previos a estar observando a su familia cuando planeaba cómo matarlos.

-¿Asusta que el mal pueda estar cerca?

-Sí da miedo, porque lo sabemos: hay lobos entre las ovejas, sin ninguna duda. Si pudiéramos medir el nivel de paranoia de cada uno, yo lo tendría muy alto.

-¿Aterra más eso o que todos podamos tener un lado norte, frío, en el corazón?

-La persona más buena, el alma más luminosa, tiene un pequeño lugar donde guarda las cosas que pesan, las tenebrosas. Unos dejamos solo tristeza en él. Otros, cosas mucho más oscuras y peligrosas.

La persona más buena, el alma más luminosa, tiene un pequeño lugar donde guarda las cosas que pesan, las tenebrosas

-¿Cualquiera puede ser un asesino?

-No en todo el mundo hay una tendencia al crimen. Las personas que han sufrido mucho, a veces, hacen infelices a los que los rodean. Otras, se convierten en el malo, en el agresor. Pero también se puede superar y ayudar a los demás, como Amaia.

El bum de «todo esto te daré»

Entre la trilogía y este título hizo una escapada a la Ribeira Sacra. Fue su hermana, que vive en Galicia, la que le recomendó la zona. Todo esto te daré, ambientado en los cañones del río Miño ganó el Planeta en el 2016 y el Premio Bancarella 2018, concedido por los libreros italianos. Suma más de un millón y medio de ejemplares vendidos. Triunfa especialmente en Alemania o EE. UU.

-¿Lo vivieron como una traición los fans?

-Todos pedían más Amaia, más Amaia. Yo pedí casi un permiso a los lectores. La oportunidad de contar historias desde otras voces y lugares. Hubo cierto riesgo, pero Todo esto te daré ha sido el Planeta más leído de los últimos diez años. Los lectores me han acompañado masivamente y espero que lo sigan haciendo.

-Y ahora, ¿habrá más Amaia?

-Sí que habrá más, pero también quiero espacio para otras novelas. Es una necesidad como escritora. Buscaré siempre esa parcela.

dolores.Los paisajes del Miño, en Ribeira Sacra, inspiraron a la escritora vasca, hija y nieta de gallegos, en su libro «Todo esto te daré», con el que ganó el Premio Planeta de Novela en el 2016, el más vendido en los últimos 10 años
Los paisajes del Miño, en Ribeira Sacra, inspiraron a la escritora vasca, hija y nieta de gallegos, en su libro «Todo esto te daré», con el que ganó el Premio Planeta de Novela en el 2016, el más vendido en los últimos 10 años

Todos pedían más Amaia, más Amaia. Yo pedí casi un permiso a los lectores

-Para Elizondo, el pueblo del Baztán, y Ribeira Sacra ha sido un filón turístico.

-Tengo una mención especial de Turismo de Navarra y me sorprende que haya gente que no conoce Ribeira Sacra. Su belleza impacta, es indiscutible, por no hablar de su riqueza cultural, en arte románico y en enología. De ambos puntos admiro el grandísimo orgullo de pertenencia de sus habitantes. Su trabajo sacrificado para vivir en lugares donde no siempre es fácil permanecer. Su entrega. Mi padre y mis abuelos trabajaron en el mar y nunca lo quisieron dejar.

-Antes de escritora, fue cocinera, hasta tuvo restaurante propio. ¿Lo extraña?

-¡No, no! [Sonríe]. Trabajas todas las horas del mundo y estás ahí, detrás, cuando el resto están de fiesta, disfrutando. Valoro mucho lo que cuesta un plato elaborado, pero yo quería ser escritora.

-¿Piensa: '¡Lo conseguí!'?

-Soy muy consciente de lo logrado, pero no tengo eso de «lo conseguí». Esto se mantiene en equilibrio casi por un concepto mágico. Gente que en su día fue muy importante, que tuvo mucho éxito, ha desaparecido. Hablamos dentro de veinte años, me lo vuelves a preguntar y, si sigo aquí, entonces me habrá salido bien [ríe].

Soy muy consciente de lo logrado, pero aún no tengo eso de «lo conseguí»

-¿Un consejo para un aspirante?

-Se tiene que armar de paciencia y coleccionar muchas cartas de rechazo, yo tengo una buena colección, y no pasa nada. El 90 % de las veces, significa que no han leído tu trabajo. Esto es una realidad. La sensación más extendida cuando no tienes a nadie en este mundo, el editorial, como es mi caso, es la invisibilidad.

-¿Se puede tener esperanza?

-Siempre hay editores buscando la nueva voz, alguien que venga con algo refrescante y diferente. Tienen que ser honestos con ellos mismos. Los autores escriben lo que está de moda, los escritores lo que les nace desde dentro del alma. No eres tan dueño de lo que escribes. Es la novela la que manda.

Hablamos dentro de veinte años, y, si sigo aquí, entonces me habrá salido bien

redondo.Sobre la continuidad de la saga protagonizada por Amaia Salazar, Dolores Redondo apunta: «Sí que habrá más, pero también quiero espacio para otras novelas. Es una necesidad como escritora. Buscaré siempre esa parcela»
Sobre la continuidad de la saga protagonizada por Amaia Salazar, Dolores Redondo apunta: «Sí que habrá más, pero también quiero espacio para otras novelas. Es una necesidad como escritora. Buscaré siempre esa parcela» Jesús Diges